La Superindustria encontró que la filial en Colombia se quedó con un contrato por $ 27.000 millones con Ecopetrol acudiendo a prácticas anticompetitivas.

Junto con Tecnicontrol deberán pagar una multa por $ 13.714 millones. Les queda un recurso de reposición.

El sello Bureau Veritas es de reconocimiento en el mundo: acredita la calidad, las buenas prácticas, el cumplimiento de las reglas por parte de las empresas. La sede en Colombia de esta exitosa firma salió triunfante en el año 2013 en una millonaria licitación de 27.000 millones de pesos con la que Ecopetrol pretendía acreditar el cumplimiento de sus compromisos con la seguridad, la salud ocupacional y el medioambiente. Sin embargo, la Superintendencia de Industria y Comercio encontró que quien estaba haciendo las cosas mal era precisamente la prestigiosa firma, que terminó protagonizando un acuerdo anticompetitivo para quedarse con el contrato.

Bureau Veritas Colombia y la firma Tecnicontrol fueron sancionadas al lado de sus representantes legales a pagar una multa de 13.714 millones de pesos por violar la libre competencia. Según la SIC, las firmas fingieron ser empresas competidoras en la licitación cuando en realidad actuaban de forma coordinada y concertada para alterar la media. Este mecanismo, que apunta a afectar el promedio con ofertas muy por debajo del valor real, fue usado a fin de que la licitación finalmente se adjudicara en 27.000 millones al competidor más cercano: Bureau Veritas Colombia.

A través de correos electrónicos, documentos, dictámenes periciales y declaraciones de empleados de las compañías
sancionadas, la Superindustria también encontró que ambas firmas hacían parte del Grupo Bureau Veritas Internacional.

En uno de los correos, conocidos por SEMANA, los representantes de Bureau Veritas Colombia informan que se habilitó una dirección electrónica a través de la cual se debían enviar todas las ofertas a fin de que existiera una planeación y elaboración centralizada, como “una sola compañía”, dice la SIC. El e-mail del 22 de enero del 2013 fue remitido por Carolina de la Torre Ariza (Ejecutiva Comercial División Industria de Bureau Veritas Colombia) a varios empleados de las dos personas jurídicas investigadas. Tiene como asunto “Proceso para elaboración de ofertas”:

Otro correo clave es el del 4 de enero de 2013 en el cual piden que se den a conocer las otras ofertas, ya que Bureau Veritas se presentará con la propuesta más alta. El mensaje tiene como asunto “Requerimiento Chevron -Operación Segura de Grúas”. Fue remitido por Carlos Hernando Varona Lehmann (director de Desarrollo de Negocios de Bureau Veritas Colombia) a Lina Marcela Lizarazo Cuevas (gerente de Propuestas de Tecnicontrol) y a otros empleados.

Otro de los documentos, tiene como asunto: “Direcciones de correo para CRM”. La sigla se refiere a una herramienta denominada Customer Relationship Manager de Tecnicontrol que tiene como propósito crear un usuario a través del cual se permita conocer “de primera mano y de manera oportuna las solicitudes de cotización”.

En este mail, Lina Marcela Lizarazo Cuevas (gerente de propuestas de Tecnicontrol) se comunica con Renato Macedo de Catrib Filho (representante legal de Bureau Veritas Colombia) y con Carlos Hernando Varona Lehmann (girector de Desarrollo de Negocios de Bureau Veritas Colombia).

Para la SIC queda claro que las empresas se aliaron para coordinar y centralizar la actuación de las empresas. Los representantes legales -dice la autoridad- conocían, participaban y dirigían la ejecución de la estrategia de coordinación. Con su estrategia aumentaban la probabilidad de que alguna de las dos compañías resultara adjudicataria del correspondiente contrato, como en efecto ocurrió.

Bureau Veritas Colombia deberá pagar una multa de 3.218 millones de pesos y Tecnicontrol una sanción de 10.156 millones  de pesos. Sus representantes legales, respectivamente, deberán responder por las siguientes multas: Renato Macedo de Catrib Filho por 144 millones de pesos y René Omar Pedraza Acuña por 195 millones de pesos.

La Superindustria aclaró que la investigación no involucra a Ecopetrol ni a ninguno de sus directivos o empleados. Y que sobre esta decisión procede recurso de reposición.

Fuente: Semana