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Por Ignacio Bustamante

La minería ha tenido un notable aporte al desarrollo del Perú en los últimos años, eso se puede comprobar en el crecimiento del PBI, en el incremento de los empleos directos, indirectos e inferidos.

Se ha hecho un buen trabajo al aprovechar el contexto de los precios de los minerales, la situación nos agarró en un momento bastante positivo para el sector.

Pero en adelante, tenemos un reto importante. Debemos ver cómo esta fuerza y dinamismo no solo se mantiene sino que se incrementa. Para eso deben materializarse los proyectos de inversión, la famosa cartera de los US$ 54.000 millones. Dentro de nuestras metas está concretar esa inversión y concretar los beneficios que esas inversiones pueden significar para el Perú.

Para que esto suceda debe establecerse un acercamiento con el gobierno y desarrollar una comunicación muy fluida y permanente.

Esto es para que el sector privado entienda los procesos del gobierno, su trabajo por acelerar esos procesos y su importancia. Y, por otro lado, para que el Estado entienda las principales prioridades del sector privado para sus inversiones. Este trabajo debe ser transparente y proactivo, si se hace eso podemos andar por buen camino.

La Sociedad Nacional de Minería ha mapeado e identificado las áreas que deben destrabarse, agilizarse y mejorarse dentro del Estado para que se propicie la inversión en los futuros proyectos mineros.

Es un trabajo muy meticuloso que sirve para enfocar con precisión los puntos en los que se debe trabajar para lograr que los proyectos mineros se concreten.

Ha sido muy saludable e importante  el mensaje que ha dado el gobierno en los últimos meses. El presidente Ollanta Humala ha dado discursos donde queda claro que el Estado, en particular el Poder Ejecutivo, ha entendido la importancia del sector minero para el Perú. Ese respaldo abierto ha sido muy valioso. Así como también ha sido valioso el marcar diferencias entre la minería formal e informal.

El trabajo que debemos hacer de ahora en adelante es lograr que los peruanos se sientan orgullosos de ser un país minero. No que piensen en la minería como un problema, sino como una solución y que los retos del sector minero son los retos de todo el Perú, así como sus beneficios son para todo el país.

En paralelo, un reto clave del sector tendrá que ver con la agenda de inversiones en proyectos. Una inversión tan grande deberá ir de la mano del reclutamiento de profesionales capacitados que hoy no existen. Lo normal es que la oferta sea mayor que la demanda y se pueda escoger lo mejor de lo mejor.

Pero hoy existe escasez de profesionales técnicos, lo cual puede significar un problema a muy corto plazo.

Hasta el momento las compañías mineras han tratado de solucionar este tema con capacitaciones, llevando su personal a Lima o llevando institutos a la mina, pero no es suficiente. Debería haber un match entre la academia y la empresa. Y difundir el trabajo en una mina como lo que es, una gran oportunidad de hacer una carrera importante, que contribuya al desarrollo del Perú.

evolución-del-índice-de-potencial-minero-2002-2012

Fuente: G de Gestión