Gabriela Jauregui Moran

Antiguamente la legislación minera no contemplaba una serie de términos que ahora manejamos con mucha familiaridad, como inclusión social, minería ilegal, protección del medio ambiente, entre otros. Cuando el presidente Ollanta Humala clausuró en Arequipa la última edición de Perumin, a la que asistieron varios ministros, destacó que los proyectos hayan venido evolucionando y se hayan incrementado en número y en capacidad, posicionando al Perú como un país atractivo para las inversiones a nivel mundial.

En este escenario podemos hablar de una ‘nueva minería’, que debemos cuidar y cautelar muy bien para que el posicionamiento obtenido –que nos ha costado mucho esfuerzo– se fortalezca más. La legislación vigente busca establecer estándares más rigurosos para la explotación de los proyectos presentes y futuros. Y las empresas involucradas tienen la responsabilidad de asumir prácticas respetuosas del medio ambiente. Quienes actúan formalmente seguramente podrán cumplir con las normas y quienes estén al margen de la ley evitarán hacerlo.

Esta ‘nueva minería’ va a ver sus frutos pronto en el refuerzo del desarrollo de las regiones, cada una con sus características peculiares.

Pero el esperado desarrollo de nuestro país es tarea de todos, por lo que debemos mostrar responsabilidad con la actividad directa e indirecta de esta ‘nueva minería’ y aplicar su respectivo abanico legislativo.

Cuidar el posicionamiento del Perú como un país atractivo para la inversión es tarea de todos. Respetar las nuevas exigencias en materia ambiental y social es ser responsables.

El análisis es del Estudio Muñiz.
Gabriela Jáuregui
Estudio Muñiz, Ramírez, Pérez-Taiman & Olaya

Fuente: Gestión