Más de 80 inversionistas japoneses mostraron interés por proyectos de inversión en Perú

Japan Business Etiquett, Vital Cultural Manners: Meishi Kokan (Business Cards)

ASIA LIGHT
Por Pablo Espinel

Hace unos días estuve en Seúl y Tokio. Lo que me llamó la atención una vez más fue que a pesar de que la globalización continúa su avance imparable en Corea del Sur y Japón, todavía existe una cultura de negocios muy arraigada y bastante tradicional. Me gustaría compartir con ustedes algunos puntos claves. Empecemos con Japón.

Los japoneses tienen generalmente nombres compuestos y lo primordial es entender que la forma de escribir el nombre es diferente a la del mundo occidental. Tradicionalmente, en Kanji (caracteres japoneses) el apellido va primero, seguido del nombre (Ej: Ota Akihiro). Sin embargo, debido al fuerte vínculo de Japón con Occidente desde el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945, hay una larga tradición de ‘occidentalizar’ los nombres y escribir el nombre seguido del apellido cuando se usan caracteres romanos (Ej: Akihiro Ota, como lo usan los descendientes de japoneses en el Perú o Brasil). En este caso se llamará a la persona por su apellido (señor Ota), aunque es muy común que se acompañe el nombre del sufijo –san para expresar respeto. Por ejemplo, el señor Akihiro Ota será Ota-san. El sufijo –san es bastante versátil, ya que se puede usar en contextos formales e informales y para ambos géneros. Lo mismo sucede con el extranjero: en Japón me llaman Pablo-san, ya que el sufijo puede ser también usado con el nombre.

La cultura de negocios japonesa puede ser un poco complicada de entender al principio. Existe un gran respeto por el orden y la armonía y por llegar paso a paso a una decisión consensuada (lo cual puede ser muy demorado) a través del famoso proceso de nemawashi, que describí en un post anterior. Asimismo, los japoneses prefieren saludar con una venia en lugar del estrechón de manos. La lógica es simple: mientras más baja la venia, más respetuosa es ésta, con lo que siempre se puede reciprocar el saludo. Esto no quita que, a veces, la venia sea seguida de un apretón de manos.

Por otra parte, a pesar de que se ha vuelto más casual desde la década de los noventa, la ceremonia de intercambio de tarjetas de presentación es muy importante para los japoneses. Es un rasgo que comparten con China y Corea, pero requiere mayor formalidad: en el momento de recibirla se debe hacer una venia y tomarla con las dos manos. Escribir en ella es considerado ofensivo. La tarjeta además debe conservarse en la mano o cerca (sin guardarse) hasta que concluya la cita. Las tarjetas no pueden presentarse arrugadas; el estado de la tarjeta dice mucho de la importancia que se da al posible negocio. A manera de acotación, la importancia de la ceremonia de intercambio de tarjetas tiene que ver con el valor que dan los japoneses al rango y la jerarquía. Con el fin del sistema feudal en 1868, las tarjetas de presentación pasaron a reemplazar de algún modo las insignias y otros indicativos de rango.

Y el traje. El traje es indispensable para dar una buena primera impresión. Aunque los códigos parecen estar cambiando hacia un estilo más casual, todavía se juzga a alguien que no porte un traje impecable y de colores neutros. Se debe también tener cuidado de la condición de las medias, pues es bastante común que las invitaciones ocurran en restaurantes donde los zapatos deben quitarse a la entrada.

Finalmente, para los japoneses la asepsia es vital: no se debe tocar o pasar jamás la comida compartida con los palillos personales o sonarse la nariz en público. Varios restaurantes tienen sandalias especiales que deben usarse para pasar a los servicios higiénicos. En muchos casos, los retretes poseen botones que levantan la tapa del excusado, desodorizan el aire después del uso e incluso disimulan sonidos biológicos naturales con música clásica:

Meet Japan's high-tech toilets | First Class

Fuente: Semana Económica