(Foto: la República)

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Cusco. Las organizaciones comunales de la provincia de Espinar, en Cusco, reiteraron su pedido al gobierno central para que cumpla con atender a los campesinos que están contaminados con metales pesados. 

En su gran mayoría son pobladores de las comunidades de Huisa y Alto Huancané que están cerca a lo que fue el proyecto minero Tintaya, ahora en fase final de cierre.

Nicanor Umiyauri, consejero de Espinar, sostuvo que además piden el cumplimiento de los compromisos suscritos en la mesa de diálogo de 2013 que pasa por seguir haciendo trabajos para elaborar un Plan Integral para la atención a los afectados y detectar la fuente de la contaminación que hasta ahora ha sido esclarecida. Y es que el estudio hecho ese año por el gobierno concluyó que en Espinar sí hay contaminación del agua, tierra y aire, pero no se logró identificar la fuente de la afectación ambiental.

Recordó que un estudio hecho por Censopas reveló que los 180 campesinos que participaron en un examen para detectar la presencia de metales pesados, tienen en sus organismos 17 tipos de minerales.

Umiyauri alertó que las comunidades podrían iniciar acciones de protesta si no son atendidos. “Hay mucha gente que está preocupada, porque no sabe si está bien o tiene alguna enfermedad”, señaló.

La República