Luz Herquinio Alarcón, responsable de Oficina Defensorial de Puno. (Foto: Los Andes)

Luz Herquinio Alarcón, responsable de Oficina Defensorial de Puno. (Foto: Los Andes)

A un mes de los luctuosos hechos del 23 de enero cuando dos policías perdieron la vida; si bien existe disposición para dialogar, las conversaciones entre los pobladores y la empresa CIEMSA Águila todavía se dan entre el recelo de ambas partes, de acuerdo a lo vertido por la Defensora del Pueblo, Luz Herquinio Alarcón.

Según la información recogida por la Defensoría del Pueblo, uno de los factores que agravaron el conflicto fue que la empresa mintió al decir que solo estaba explorando el terreno cuando se hallaron evidencias de que estuvo explotando minerales incluso desde el año 2013.

Este hecho explica la desconfianza de los pobladores, quienes exigen inflexiblemente la presencia del gerente general o algún miembro del directorio de la empresa, y se niegan participar en una reunión con un representante de menor rango.

Por su parte, los directivos de la empresa minera, si bien accedieron a traer al gerente general o algún miembro del directorio, se niegan a reunirse en la localidad de Ocuviri y lo harán solo en Lampa por razones de seguridad.

Pesa sobre los pobladores la duda de que las acusaciones fiscales persigan a los dirigentes no gratos a la empresa CIEMSA Águila, tal como lo manifestó al alcalde de esta localidad a la representante de la Defensoría del Pueblo.

Del otro lado queda el deber de evitar la impunidad por las muertes, más aún con el innegable ensañamiento que existió sobre los policías Antonio Waldir Cortes Villasante y Yimmy Augusto Quispe Yarin, enfatizó la letrada.

Así, la comunicación se evidencia frágil puesto que la segunda reunión programada para el 10 de febrero no se llegó a realizar, quedando como próxima fecha el 27 de febrero.

Los Andes