Fernando Gil Sanguineti

OPINIÓN
Fernando Gil Sanguineti
MANAGING PARTNER DE JAMMING

Si tuviéramos que caracterizar a la mujer y al hombre en sus estilos gerenciales, se podría afirmar que a la mujer le caracteriza la obtención de resultados a través de características como la intuición, el liderazgo, la creatividad y la emocionalidad.

Al hombre lo caracteriza la obtención de resultados a través de la autoridad, la racionalidad, el empuje, el poder, la fuerza. Cada persona tiene su dosis de feminidad y masculinidad y a partir de allí se podrán determinar las ventajas y desventajas.
El sistema capitalista es eminentemente “masculino”: resultados, racionalidad, números, presión, autoridad y poder. En Perú hemos tenido una presión muy fuerte hacia los resultados en los últimos años y un reforzamiento de los rasgos típicos del sistema capitalista.

Las mujeres se desempeñan mucho mejor en áreas donde las relaciones, la intimidad con el cliente, el afecto, el clima laboral, la atención al cliente son fundamentales.

Las áreas de recursos humanos tienen una preferencia por ellas, pues son muy bien lideradas por mujeres; así como Atención y Servicio al Cliente, Laboratorio, Calidad, entre otros. Se trata de rubros donde la preocupación por el detalle es importante.

Los hombres tienen una preferencia más por actividades vinculadas a procesos y procedimientos, racionalidad, números y análisis; operaciones, minería e industria.

Por la orientación a resultados, determinadas empresas tienen equipos comerciales preferentemente varones, sobre todo si se trata de productos en donde las especificaciones son fundamentales.

Gestión