Dr. Martín Tanaka

Dr. Martín Tanaka

En la política la confrontación es saludable, en tanto expresa los conflictos y las diferencias sociales; pero cuando deviene en polarización y extremismo, empieza a primar una lógica de liquidación de los adversarios. Resulta entonces que solo hay promineros y antimineros, y para los primeros quienes protestan son terroristas que boicotean el desarrollo para supuestamente “vivir” de la pobreza de una población manipulada, por lo que corresponde es la pura represión; y para los segundos lo único que parece interesar es lograr una victoria política, derrotar a la gran empresa, al gobierno, a la derecha. En medio, una oportunidad de inversión y desarrollo importante se pierde sin razones claras, ciudadanos y polícías muertos y heridos, agricultores empobrecidos, niños sin asistir a la escuela. Urge salir de un escenario de polarización, donde solo ganan los extremistas, y de suponer que una negociación consiste en la amenaza, la extorsión, la manipulación de la información o el soborno.

Como lecciones de fondo, de un lado, llama la atención la dificultad de algunas empresas y del Estado para aprender de los conflictos. Tía María tiene una historia larga que ya en 2011 dejó tres muertos en el camino; el segundo Estudio de Impacto Ambiental no buscó realmente despejar los temores de la población, sino aprovechar la urgencia gubernamental de promover la inversión. Y el Estado ha reaccionado demasiado tarde. Es llamativo el contraste en la misma región Arequipa con el proyecto Cerro Verde, que más bien aparece buscando legitimarse como socio en iniciativas de desarrollo de la región. Los mineros, antes que seguir un falso espíritu de cuerpo poniéndose detrás de la Southern, reclamando orden y espantándose ante las protestas, debieran presionar para que como gremio las relaciones comunitarias se tomen mucho más en serio. Algunas declaraciones del Presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía, Carlos Gálvez, han sido lamentables.

De otro lado, también hemos visto una vez más que, así como no hay representación política en el Perú, tampoco hay representación social. Los supuestos dirigentes aparecen más bien como brokers con intereses propios, distinguibles de los de la población, de los partidos, que quieren desarrollar carreras como mediadores en protestas y conflictos. Las autoridades políticas locales quedan totalmente desbordadas por la acción de estos operadores, que ganan espacio ante la ausencia de otros actores. Las izquierdas tienen que deslindar claramente cuando intereses particularistas pretenden pasar por los de la población. No solo porque ellas deberían estar interesados en representar sus intereses, también porque la izquierda debe condenar enfáticamente el uso de la violencia en las protestas. Ha tomado tiempo abandonar el paradigma revolucionario insurreccional, pero parece haber quedado la idea de que en las protestas sí sería válido. No lo es, y más bien legitima la criminalización de un derecho ciudadano.

La República

 

 


*  Martín Tanaka es Doctor en Ciencia Política por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) sede México. Actualmente es investigador principal y miembro del Consejo Directivo del Instituto de EstudiosPeruanos , y profesor asociado y Coordinador de la especialidad de Ciencia Política y Gobierno en la Facultad de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica del Perú . Ha sido Visiting Fellow postdoctoral en elHelen Kellogg Institute for International Studies de la Universidad de Notre Dame , Indiana (2003 y 2009).

Sus temas de investigación comprenden: democracia, Estado, política y partidos; movimientos sociales, participación ciudadana y conflictos; cultura política, en Perú y América Latina.

Tiene libros y capítulos de libros publicados por elInstituto de Estudios Peruanos , Cambridge University Press , Stanford University Press ,Brookings Institution Press , Lynne Rienner Publishers , Routledge , PRAEGER , Fundación Pablo Iglesias , Instituto de Estudios Sociales de la UNAM , la Universidad de Londres , entre otros. Es también columnista semanal del diario La República .

Entre sus últimas publicaciones se encuentran:

  • “La relación entre investigación y políticas públicas en América Latina: un análisis exploratorio” (coautor con Rodrigo Barrenechea y Jorge Morel). En: Correa, Norma, y Enrique Mendizábal, eds., Vínculos entre conocimiento y política. El rol de la investigación en el debate público en América Latina . Lima, CIES, 2011, p. 35-81.

  • Editor y coautor (con Francine Jácome) de Desafíos de la gobernabilidad democrática . Reformas político-institucionales y movimientos sociales en la región andina . Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2010 (438 p.).

  • Editor y coautor, con Romeo Grompone, Las protestas sociales en el Perú actual. Entre el crecimiento económico y la insatisfacción social . Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2009 (416 p.).

  • Minería y conflicto social (coautor con José De Echave, Alejandro Diez, Ludwig Huber, Bruno Revesz y Xavier Ricard). Lima, Instituto de Estudios Peruanos – CIPCA – CBC – CIES, 2009 (426 p.).