Edwin Quintanilla
Viceministro de Energía
El pasado lunes fue un gran día para el Perú, finalmente se concesionó el Gasoducto Sur Peruano, que implica más energía a menos costo para todos los peruanos y el inicio de un nuevo polo de desarrollo para el sur. Los beneficios del proyecto son la seguridad energética, precios económicos de la energía, fuentes más limpias, miles de empleos, construcción de centrales, más exploraciones por hidrocarburos, entre otros.
El Gasoducto Sur Peruano (GASUR) consiste en la construcción de 1.212 kilómetros de ductos que van desde Malvinas en Cusco hasta Ilo en Moquegua. Proinversión contrató a expertos para que definieran el costo del servicio de este proyecto (inversión, operación y mantenimiento) y concluyeron que lo máximo que debía considerarse eran US$ 7.800 millones. El proyecto se adjudicó por US$ 7.328 millones, con lo cual se ahorran US$ 472 millones.
Las diferencias y mejoras de diseño respecto al proyecto primigenio (2008) de la empresa Kuntur son evidentes. Este consistía en un ducto de diámetro de 24 pulgadas para el gas, con costos revisables periódicamente hasta el final de la obra. El replanteamiento del mismo proyecto para el 2012 modificó el diámetro del ducto a 30 pulgadas para el gas y 18 pulgadas para el ducto de líquidos con una inversión a esa fecha de US$ 4.760 millones (no incluye costos de operación y mantenimiento).
Entonces, ¿cuáles son las diferencias? En cuanto a diseño y mercado (nuevo proyecto GASUR versus el Proyecto primigenio Kuntur):
· Seguridad energética: Nuevo concepto definido en la Ley 29970.
· Ducto de líquidos en zona de seguridad energética: Ducto incorporado en el primer tramo de 74 kilómetros (24 pulgadas de diámetro).
· Ramal a Quillabamba y gasoductos regionales: Incorporados en el proceso, con instalación de una central térmica de 200 MW en Quillabamba con ducto de 40 kilómetros, y los gasoductos regionales consideran desarrollo de los estudios y licitación como parte del GASUR.
· Mayor longitud de gasoductos: 1.212 kilómetros con diámetro constante (versus 1.075 kilómetros del proyecto Kuntur).
· Financiamiento 100% privado. No recurre a “préstamo puente” del Estado.
· Demanda de gas natural: Asegurado con generación de 2.000 MW en el sur. Esta variable era incierta en el proyecto Kuntur, y por lo tanto las tarifas resultantes serían mayores.
· Oferta de gas natural: GASUR se basa en las reservas probadas del Lote 88 (destinada al mercado nacional), en tanto que el proyecto anterior estaba en la espera de comprobación de nuevas reservas de gas natural hasta hoy no confirmadas.
En cuanto a montos de inversión, es necesario aclarar que el proyecto primigenio solo se refería a montos de inversión, pero el nuevo y mejorado proyecto se refiere tanto a ese monto, como a los costos de operación, mantenimiento, impuestos, pagos al regulador, intereses, costos variables de compra de gas, etc.
La República
El monto adjudicado es mayor porque incluye más conceptos y a precios de futuro (2019). En un ejemplo simple, la inversión en un camión no es lo mismo que los costos de su funcionamiento (operación y mantenimiento) como chofer, ayudante, el SOAT, los seguros, el combustible, los lubricantes, los repuestos, etc.
Al cálculo corresponde incluir el valor del dinero en el tiempo (que incluye la inflación), pues tampoco es lo mismo vender una casa en el 2008 que la misma casa (o inclusive una mejor) en el 2019.
Existen beneficios evidentes si el proyecto es puesto en operación en una fecha anterior, que es factible con la empresa ya adjudicada. Se estima que su adelanto significa 8 millones de dólares al día (explicado principalmente por los menores costos marginales de generación del sistema interconectado) como los beneficios del GASUR, básicamente por el efecto de sustituir al diesel por gas natural. Esta ventaja supera los beneficios que hubiera significado retrasar el proyecto y nos incentiva a concluirlo al menor plazo posible.
¿Qué podemos concluir? El Gasoducto Sur Peruano es un proyecto diferente, al ser más completo, con mejor diseño, más seguro y de mayor capacidad de transporte y a un menor costo que otras alternativas. Nuestro país avanza firme en su propósito de brindar más energía económica.
EDWIN QUINTANILLA