Se proyecta que la tasa de jóvenes sin empleo en el mundo llegará a 13,1% en este año, frente a una de 4,5% en el caso de los adultos, según la OIT.

Se proyecta que la tasa de jóvenes sin empleo en el mundo llegará a 13,1% en este año, frente a una de 4,5% en el caso de los adultos, según la OIT.

El Banco Mundial tiene un inquietante mensaje para los jóvenes de todo el mundo: sean hombres o mujeres, vivan en Túnez o en los Estados Unidos, van a tener dificultades para encontrar empleo.

En todas las regiones y continentes, las personas de 15 a 29 años tienen por lo menos el doble de probabilidades que los adultos de estar sin empleo. El mundo tendrá que crear 600 millones de puestos de trabajo en los próximos diez años, o 5 millones por mes, sólo para impedir que la situación empeore, dijo la institución de préstamo de Washington en un informe dado a conocer el martes con socios de coalición como la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Los trabajadores más jóvenes fueron los más afectados por la crisis financiera y la recesión mundial de la última década porque a menudo tenían empleos temporales, que ofrecen menos protección. Se proyecta que la tasa de desempleo juvenil llegará a 13,1% en 2015, frente a una de 4,5% en el caso de los adultos, según la OIT.

Los empleadores mundiales no sólo buscan aptitudes técnicas y académicas sino también cualidades como ser abierto, responsable y organizado, según el análisis de 155 páginas titulado “Hacia las soluciones para el empleo juvenil”. Los trabajadores jóvenes a menudo están excesivamente calificados o poco calificados para un empleo, agregaba el documento.

“En las economías emergentes que están progresivamente más basadas en los servicios, los empleadores se encuentran con una población de trabajadores que carece de las aptitudes necesarias”, decía el informe. “En otros lugares, el problema es que muchos de los desempleados tienen alto nivel de educación pero el mercado requiere otras competencias o aptitudes más técnicas o vocacionales”.

Lo que está en juego es el bienestar de toda la economía mundial. Al no tener ingresos, millones de jóvenes quedan sumidos en la pobreza. Al demorar su ingreso a la población activa o aceptar empleos de bajos salarios, muchos limitan el potencial de ingresos durante su vida. Cuando los jóvenes no trabajan, los gobiernos no reciben ingresos impositivos y las empresas no ganan clientes.

“Los costos sociales también aumentan constantemente”, indicaba el informe, haciendo referencia a los levantamientos encabezados por los jóvenes en muchos países árabes y el aumento de la insurgencia económica y el extremismo juvenil. “Lo que vemos es una generación en crisis económica”.

El informe fue publicado por una coalición llamada Solutions for Youth Employment que también comprende a la International Youth Foundation, la organización de desarrollo infantil Plan International, la firma de investigación de políticas públicas RAND Corp. y Youth Business International, red que ayuda a los jóvenes a crear sus propias compañías.

Bloomberg