Tía Matía-Southern-minería

El viernes la minera Southern Copper Corporation (SCCO) emitió bonos por US$2,000 millones en tramos a 10 (US$500 millones) y 30 años (US$ 1,500 millones). ¿Qué factores llevaron a la minera a realizar un financiamiento de tal magnitud?

EL MOMENTO

El timing fue determinante. “Estábamos mirando la posibilidad de emitir desde el cuarto trimestre del 2014″, contó a SEMANAeconómica Raúl Jacob, vicepresidente de finanzas & CFO de SCCO. . Sin embargo, el precio del cobre cayó fuertementea partir de noviembre, y en febrero tocó US$2.59/libra, su nivel más bajo desde el 2009. “Enero y febrero no era el mejor momento, a pesar de que ya estábamos listos [para la emisión]. Desde entonces estuvimos siguiendo el mercado hasta que se efectuó la transacción en las condiciones que esperábamos”, señala Jacob.

En marzo se inició una recuperación en el precio del cobre (US$2.69/libra) que se acentuó en abril (US$2.73/libra). Además, las expectativas de un alza de tasa de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos se postergaron hacia finales de año (antes se consideraba que subirían en juno), lo que ha mantenido un bajo costo de financiamiento por un plazo mayor al esperado. Ambos factores crearon una ventana de oportunidad para que la empresa obtuviera un financiamiento de largo plazo a tasas atractivas.““Es un buen momento [para financiarse]”, dijo Jacob. “El ambiente macroeconómico ha mejorado para nuestra compañía y nuestras tasas de interés [de los bonos] reflejan ese menor riesgo”, señaló Jacob.

GRAF-mineria-3

EL ATRACTIVO

La emisión alcanzó una demanda por cerca de US$8,000 millones, cuatro veces el monto original de la transacción. Varios factores distinguieron el atractivo de esta emisión respecto a las emisiones de otras empresas peruanas. Primero, su diversificación geográfica (tiene operaciones en el Perú y en México) disminuye su riesgo crediticio, según Irvin León, analista de renta fija de Credicorp Capital. De hecho, la minera posee una calificación crediticia con grado de inversión, lo que la destaca entre otros bonos high yield, que han sido más golpeados por la incertidumbre de la Fed y la desaceleración económica de la región. Hoy, “Brasil está complicado”, afirma Jacob. “No hay compañías brasileñas realizando emisiones [por el escándalo de corrupción asociado a Petrobras, que aumentó el riesgo y costo de financiamiento]. Otras compañías de mercados emergentes también están con problemas”.

Ello ha limitado la oferta de bonos latinoamericanos y a su vez incrementó la demanda por los bonos de Southern Copper, cuyos bajos costos de producción (US$1.05/libra) le permiten operar con márgenes cómodos pese a la caída del cobre.

LA META

La empresa finalizó el año anterior con una caja de US$364 millones; sin embargo, ha proyectado invertir este año US$2,700 millones dado el agresivo plan de inversiones que tiene para este año: el proyecto Tía María, la ampliación de su mina Toquepala, y otros proyectos en México. ¿De dónde saldrá la plata?

GRAF-mineria-2

Los ingresos de la empresa son insuficientes, pues han caído en los últimos años por el menor precio del cobre. En el 2014, las utilidades de Southern Copper cayeron 18% y su flujo de caja operativo cayó 27% a US$1,356 millones. Además, la empresa invirtió más de US$1,500 millones en su plan de crecimiento, por lo que el flujo de caja libre (flujo de caja operativo – inversión) terminó el año en negativo. 

GRAF-mineria-1

Por ello, Southern Copper necesitaba financiarse para continuar con su plan de expansión. “Los US$2,000 millones [emitidos] nos da tranquilidad de tener caja, y no hay que olvidar que la compañía tiene generación de efectivo”, afirmó Jacob. Los proyectos en México permitirán a Southern Copper mejorar su Ebitda y generación de caja: en el 2015 la empresa puso en marcha una nueva planta en su mina Buenavista y agregará una concentradora en la misma unidad minera. Así, en el 2016 la empresa su producción de cobre aumentará en 900,000 TM. En el Perú, sólo cuentan con el permiso de construcción para la ampliación de Toquepala. El desarrollo de Tía María aún es incierto, pues continúa el conflicto social en torno al proyecto. Southern Copper recientemente postergó el inicio de producción del proyecto para mediados del 2017. De hecho, Jacob reconoció que el conflicto pudo haber afectado negativamente la emisión de los bonos, por ser Tía María uno de los cuatro grandes proyectos que actualmente posee la minera.

Además de su crecimiento, Southern Copper podría utilizar el monto recaudado para financiar una adquisición. Si bien Jacob dijo hace unos meses que la minera podría aprovechar la coyuntura de bajos precios para comprar, señaló que por ahora no tienen un plan en marcha para ello.

El cobre y el zinc serían los principales commodities en donde Southern enfocaría su crecimiento inorgánico. La minera es candidata natural para adquirir una participación en el proyecto cuprífero Quellaveco en Moquegua. “Sí le interesaría por las sinergias que puede generar con su mina Cuajone”, explicó Sebastián Cruz, analista de Kallpa SAB. Óscar González, CEO de Southern Copper, dijo el año pasado que planteó a Anglo American, la minera propietaria del Quellaveco, la posibilidad de asociarse. Si bien Anglo American ha afirmado estar abierta a realizar un joint venture para desarrollar el proyecto, su ejecutivo a cargo del negocio de cobre declaró que actualmente no están en conversaciones con Southern Copper.

La emisión llevará a que el apalancamiento de la compañía suba de un ratio Deuda Total/Ebitda de 1.5x a 2.3x, debajo del 2.5x que la compañía se ha fijado como límite interno. La minera espera reducir este apalancamiento una vez que se pongan en marcha sus proyectos en México y en el Perú.

Semana Económica