La desconfianza en el valle de Tambo (Islay), por falta de soluciones ante la escasez del agua, se acentúa. Los dirigentes de los agricultores han decidido rechazar toda reunión con funcionarios del Estado, mientras el ministro de Agricultura, José Hernández, no vaya a la zona.
Por eso hoy no acudirán a Moquegua para visitar la presa Pasto Grande. Tampoco participarán de la cita convocada en el Gobierno Regional de Arequipa por la declaratoria de emergencia del valle.
En Tambo, miran con malos ojos las intenciones del gerente general de la represa Pasto Grande, José Carlos Iraha, de mostrarles la situación del embalse. Dicen que el funcionario debe ir al valle para que vea cómo el río Tambo, que los abastece, va muriendo.
“Nuestra respuesta a su invitación para mañana (hoy) es no, porque nos saldrán con justificaciones para no darnos agua”, sostuvo Marilú Marroquín, presidenta de la Junta de Usuarios de La Ensenada – Mollendo – Mejía.
La misma posición adoptó el presidente de la Junta de Usuarios del Valle de Tambo,Jesús Cornejo. Él está en contra de la reducción de la dotación de agua de Pasto Grande.
NO IRÁN DE REUNIONES
La gobernadora regional Yamila Osorio convocó a los dirigentes de Tambo para participar también hoy de una reunión con el viceministro de Desarrollo e Infraestructura Agraria y Riego, Jorge Montenegro. La cita es para tomar decisiones por la declaratoria de emergencia decretada, pero a esta cita tampoco arribarán.
Cornejo sostuvo que por acuerdo de dirigentes, alcaldes distritales y el provincial, se estableció que no participarían de reuniones si las autoridades no acudían a Islay.
Para Marroquín, la propuesta de construir pozos para extraer agua subterránea en la provincia no es una solución. Temen que el agua esté cargada de manganeso, arsénico y boro.
La República