Mario Alvarado, CEO de GyM (Foto: Semana Económica/Sandra Gutiérrez)

Mario Alvarado, CEO de GyM (Foto: Semana Económica/Sandra Gutiérrez)

Durante el 2014, el gobierno aprobó cuatro paquetes de medidas para reactivar la economía. Sin embargo, para Mario Alvarado, CEO de Graña y Montero (GyM), estos no tendrán mayor impacto mientras no se solucionen las trabas burocráticas. En entrevista con SEMANAeconómica, Alvarado comenta sobre las dificultades que ha enfrentado la empresa en el 2014 y las perspectivas futuras. Sin dejar de la lado la construcción minera, GyM ahora apunta a trabajar más en infraestructura y oil & gas.

De acuerdo con Credit Suisse, el EBITDA de GyM en 2014 y 2015 estaría por debajo del de 2013. Recién se empezaría a recuperar a partir del 2016…
Tengo diez proyecciones, en mi informe de mercado, de qué es lo que dicen los analistas y todas son diferentes. Mientras Credit Suisse dice que vamos a hacer US$361 millones, el promedio de los diez reportes dice que nuestro EBITDA del 2015 será de US$387 millones. No sé a cuál hay que creerle (ríe).

GyM perdió alrededor de US$10 millones por la cancelación de un proyecto de mantenimiento de carretera en el Cusco. ¿Esta mala experiencia los motiva a tener mayor cautela al trabajar con las regiones?
Sí. Uno no debe asumir que la contraparte está preparada para hacer lo que en teoría dice que va a hacer. Nosotros no conocíamos la comunicación que había entre el gobierno regional y el Ministerio de Transporte. Hubo un debate muy largo, muy complejo, nos dejaron de pagar, etcétera.

De los proyectos de infraestructura realizados desde el 2010 hasta hoy, alrededor de un 90% presentan retrasos considerables. ¿Ustedes han cuantificado la afectación que sufren por estas demoras?
Afecta mucho. Es muy costoso, mucha gente parada, mucha gente haciendo trámites innecesarios. ¿Cuántos de los proyectos mineros que son clientes nuestros estarían en ejecución? ¿Cuántos proyectos de inversión en los que podríamos estar participando se han demorado? Es una cosa difícil de cuantificar pero si tú me dices “se han retrasado proyectos por US$3,000 millones”, bueno, la parte proporcional que hubiésemos ganado de eso.

¿Cómo afectan a GyM los paquetes de medidas lanzados por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) el año pasado?
No van a afectar mucho. Siempre hay un efecto positivo en el tema de los impuestos para empresas como nosotros que reinvertimos casi todo, pero no es un efecto tan grande como para cambiarnos la forma de pensar. Son pequeñas cosas que ayudan pero no hay un cambio fundamental en el enfoque del Estado. Pasarte años haciendo trámites y aprobaciones es frustrante.

Sus ‘nuevos motores’ serán infraestructura y oil and gas. ¿Dejarán un poco de lado la minería?
Nosotros hemos desarrollado un expertise muy importante en construcción minera y tal vez seamos la empresa de construcción minera con mayor experiencia en Latinoamérica. Eso es algo que no podemos desperdiciar y lo vamos a seguir haciendo. La minería no va a bajar, lo que no va a tener es ese motor que pensamos que iba a tener y lo que estamos buscando son otros motores de crecimiento.

“Toda crisis genera oportunidades” dijo hace poco. ¿Qué oportunidades ha identificado GyM?
Hay dos tipos de oportunidades: las internas y las externas. Las primeras son aquellas que se generan luego de crecer tantos años a un ritmo muy fuerte. Esas ineficiencias en los procesos que debemos enfrentar. Debido a esto, tenemos muchos proyectos internos por realizar, como repotenciar nuestro sistema de producción Lean.
Por otro lado, las externas consisten en las oportunidades de inversión que llegan a nosotros. Al tener una estructura financiera fuerte, nos llaman con oportunidades de inversión empresas que no están en una buena posición financiera y que prefieren asociarse antes que perder el proyecto. Lo difícil ahí es ser lo suficientemente cauto para tomar las correctas porque no tenemos capacidad de inversión ilimitada. La idea es entrar selectivamente a los proyectos midiendo nuestra capacidad de inversión.

Ante este nuevo contexto, ¿GyM mantiene su plan de inversión previsto en el 2013 (US$4,000 millones en cinco años)?
La estructura financiera de cada proyecto es la que nos va guiando, porque nosotros vemos proyecto por proyecto y bajo una política de que no se contagien. Hay proyectos que pueden tener más o menos cantidad de capital, sin embargo, nuestro plan sigue siendo US$4,000 millones en cinco años (hasta 2018).

SemanaEconómica