Jorge Gastelumendi, de The Nature Conservancy.

Jorge Gastelumendi, de The Nature Conservancy.

Aunque Perú es uno de los países más vulnerables al cambio climático, falta voluntad política para llevar adelante una estrategia nacional que permita afrontar adecuadamente dicho fenómeno que sacude al planeta y que trae consigo irreparables daños materiales, con secuelas económicas y sociales, sostuvo Jorge Gastelumendi, de The Nature Conservancy.

“Un país puede tener un grupo o secretaría ejecutiva especializada capaz de ejecutar con éxito un proceso de esa naturaleza, pero si no hay voluntad política (del gobierno) para que esto funcione, no servirá de nada, se fracasará”, afirmó.

Señaló que los países exitosos en establecer una acción institucionalizada en el tema climático, son los que han tenido o tienen presidentes con mucha visión y que han tomado el asunto del cambio climático como algo personal, “más allá de un aspecto ambiental, lo consideran como un tema de desarrollo económico y social”.

Recordó que en Brasil, Lula tomó la agenda sobre el tema y la sacó adelante y en México, Felipe Calderón hizo lo mismo.
“Son países en los que la voluntad política ha primado, y ese es el primer paso y la clave para crear una institucionalidad en la lucha contra el cambio climático”, acotó.

La experiencia de Brasil

Refirió que, Brasil es un ejemplo interesante y cuenta con una mesa política llamada Comité Interministerial del Cambio Climático, avalada por una ley especializada.

En este marco, se creó un grupo ejecutivo que está en manos del ministerio del Ambiente, pero por delegación, y que coordina con otros sectores importantes, añadió.

“Este grupo de trabajo tiene una capacidad técnica tal, que ha logrado desarrollar una estrategia y plan nacional de cambio climático muy detallado, de unas 400 páginas, muy específica en cuanto a prioridades y actividades”, narró.

Gastelumendi agregó que el Comité Interministerial negocia el aterrizaje de los elementos de dicha estrategia dentro de los planes sectoriales, los que a su vez se transforman en planes de acción con actividades específicas, y con presupuesto fijo.

Fondo de 300 millones de dólares

Indicó que Brasil creó también el Fondo Nacional de Acción Climática (Fondo Clima), que recauda 300 millones de dólares al año, producto de un impuesto sobre el petróleo que producen, y que es manejado por el Banco Nacional de Desarrollo. “Asignan recursos a las actividades específicas de sectores involucrados en la estrategia nacional de cambio climático”, destacó.

Manifestó que la gestión recae en el ministerio del Ambiente, que coordina con otros ministerios y tiene capacidad técnica adicional para desarrollar dicha negociación con todos los sectores.

También negocia con los Estados y gobiernos locales cuando se trata de involucrar territorios determinados. “Entonces, hay una negociación sectorial y otra territorial”, observó.

Cambio climático es tema transversal

Gastelumendi explicó que el cambio climático es un tema transversal porque impacta zonas geográficas que no están divididas ni por sectores ni ministerios, y a la larga eso implica que si, por ejemplo, hay un impacto sobre alguna cuenca hidrográfica, este afectará a múltiples sectores.

“Si hay mucha erosión por deforestación, el responsable es el ministerio de Agricultura; si se trata de un impacto sobre el agua en el río, que genera huaycos e inundaciones en ciudades, es competencia de las municipalidades; y si hay que mejorar la capacidad de las cuencas para que capturen agua y evitar la erosión, es tarea del ministerio del Medio Ambiente”, acotó.

Sobre los flujos financieros para atender estos problemas, manifestó que tienen que ser canalizados a través los sectores de Finanzas, Ambiente, Agricultura, las municipalidades, y gobiernos regionales.

Cómo ejecutar estrategia nacional

Recordó que antes, era fácil manejar este tema por sectores, cada uno establecía su política, su plan sectorial que era aprobado por el ministerio de Economía y Finanzas, les daban un presupuesto y echaban a andar su proyecto.

“Pero hoy, el cambio climático pone retos que engloba una acción conjunta, transversal de los diferentes sectores”, remarcó.

“En ciertos países hay mesas o secretarías, no de diálogo, sino políticas, de los diferentes sectores, regiones y gobiernos locales, que se sientan a coordinar y a conversar sobre la visión del país para afrontar ese fenómeno”, reseñó.

Detalló que son mecanismos manejados por el ministerio del Ambiente, y son las que se encargan de elaborar una estrategia central de Cambio Climático con objetivos y prioridades muy claros, y después negocia con cada sector y cada región para que en sus planes de desarrollo puedan aterrizar elementos de esta estrategia, y así canalizar su implementación.

“De esta manera, fusionas la estrategia nacional dentro de los planes sectoriales sin romper las estructuras que ya existen, porque los sectores van a seguir funcionando como tales, y podrán trabajar sus iniciativas propias con el agregado de elementos del plan nacional”, indicó.

Apunte

* Brasil cuenta con una caja de 300 millones de dólares anuales para financiar la estrategia nacional de cambio climático.
* El grupo de gestión lo lidera el Ministerio del Ambiente que coordina actividades específicas con otros ministerios y tiene capacidad técnica adicional para negociar con todos los sectores y los Estados, que equivalen a las regiones en Perú.

interclima.minam.gob.pe