El Viceministerio de Interculturalidad anota que está pendiente modificar el área en la que se usarán explosivos para la búsqueda de gas.
Dos semanas después de haber recibido las respuestas de la empresa operadora del proyecto Camisea, el Viceministerio de Interculturalidad notificó ayer el informe en el que detallan el levantamiento de 34 de las 37 observaciones planteadas al estudio de impacto ambiental (EIA) de la ampliación del proyecto gasífero, que se desarrolla en la reserva territorial para pueblos en aislamiento y contacto inicial, en el Cusco.
El documento –enviado al Ministerio de Energía y Minas– señala, sin embargo, que todavía está pendiente que la empresa modifique el área en la que la empresa realizará la prospección sísmica 3D, pues podría afectar a la población indígena.
“La empresa operadora [Pluspetrol] ha planteado un corte de 6 mil hectáreas, pero nosotros estamos pidiendo un corte que abarque la cabecera del río Paquiría, por eso le hemos propuesto que reduzca su intervención [de la sísmica 3D] 1.500 hectáreas adicionales”, explicó a El Comercio, Patricia Balbuena, viceministra de Interculturalidad.
La prospección sísmica 3D es un método geofísico que permite determinar mediante la detonación de explosivos (cuatro kilos en cada uno de los 7.500 puntos) la existencia de los bolsones de gas en el subsuelo.
Las otras observaciones, aclaró Balbuena, tienen que ver con el número de helicópteros que usará la empresa y el número de hectáreas que serán ocupadas por las actividades. “Faltan precisar ambas cifras”, dijo.
La viceministra indicó que la mayoría de observaciones fueron levantadas porque la empresa aceptó, entre otros aspectos, la reubicación de un pozo que estaba próximo a un asentamiento indígena. También se comprometió a trabajar solo en horarios diurnos y a que la intervención sea progresiva y secuencial. “Han atendido las observaciones para que su plan de contingencia cumpla con los estándares del Viceministerio de Interculturalidad”, precisó.
La opinión técnica de este viceministerio es el último requisito que le falta a la empresa a cargo del proyecto para iniciar los trabajos de exploración en la reserva. Resueltas las observaciones, la empresa podrá obtener la opinión técnica favorable.
NUEVOS MONTOS
Con respecto al fondo de compensación para la población de la reserva territorial (3 millones 400 mil dólares) y que hasta ahora no ha podido ser invertido, la viceministra explicó que del 14 al 17 de enero viajarán a la zona para “realizar una asamblea en la que se elegirán a los representantes que decidirán las prioridades del gasto”.
Como parte de las observaciones planteadas en noviembre pasado, se pidió a Pluspetrol incrementar el monto compensatorio para los pueblos indígenas de la reserva. “Ahora sería cuatro o cinco veces más”, anunció Balbuena.
“HACE FALTA UN ESTUDIO EXHAUSTIVO”
El ex viceministro de Interculturalidad Paulo Vilca hizo notar que la decisión de levantar la mayoría de observaciones ha sido apresurada, pues no se ha tomado en cuenta la recomendación del relator especial de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, James Anaya, que hace poco visitó Perú para conocer los alcances de este tema.
“Él recomendó que antes de que se tome cualquier decisión sobre las actividades económicas en la reserva, se debería realizar un estudio exhaustivo sobre la presencia de pueblos en aislamiento. Con este levantamiento, el Estado Peruano estaría incumpliendo esta recomendación”, cuestionó Vilca.
Este Diario consultó a los representantes de Pluspetrol sobre el levantamiento de observaciones y las que aún están pendientes de resolver, pero dijeron que esperarán que la Dirección General de Asuntos Ambientales del Ministerio de Energía y Minas los notifique oficialmente. La empresa sería notificada hoy.
El Comercio