Los mineros colocaron una bandera de Chile a 600 metros bajo tierra.(Fotos: EFE)

Los mineros colocaron una bandera de Chile a 600 metros bajo tierra.(Fotos: EFE)

Llevan más de 11 días a más de 650 metros de profundidad para reclamar que se les pague el dinero que se les debe. Son 73 mineros de la mina de carbón Santa Ana en Curanilahue, provincia de Arauco, en el sur de Chile.

El pasado martes 11 de agosto los 170 trabajadores de la mina iniciaron una huelga indefinida para protestar por la falta de pago de los sueldos de julio y agosto así como las cotizaciones de salud y seguridad social desde hace un año.

Pero 78 de ellos fueron más allá de un paro ordinario y decidieron no salir del yacimiento, aunque cinco de ellos se han visto obligados a salir por cuestiones de salud.

Se dice que las deudas ascienden a 400 millones de pesos (unos US$570.000).

Mineros y familia, por un trabajo digno” es el lema que mantiene a los trabajadores firmes en su acción de protesta, desafiando las malas condiciones en las que se encuentran a tal profundidad.

Y no se quedarán ahí.

Si no se atienden sus demandas, amenazan con seguir bajando, hasta los 1.100 metros bajo tierra.

“El Estado invirtió millones en rescatar a los 33 (de Copiapó); nosotros sólo pedimos que nos paguen lo que se nos debe”, le dijo uno de los mineros, Pedro Orellana, al diario chileno La Tercera.

Piden intervención del gobierno

El senador por Biobío y presidente del Movimiento Amplio Social, MAS, Alejandro Navarro, visitó la mina esta semana y exigió la reacción del gobierno de la presidenta Michelle Bachelet.

Según declaraciones de Navarro este fin de semana a El Diario Cooperativa, el conflicto puede ser “un golpe mortal para la credibilidad del gobierno” y expresó su preocupación ante la posibilidad de que muera algún trabajador.

El senador pidió que los ministros del Interior, Minería y Trabajo se trasladen a la zona para comprender el alcance de la protesta.

Por su parte, el subsecretario de Trabajo, Francisco Javier Díaz, criticó a los dueños de la mina quienes -según denunció- “se fueron para la casa”.

Díaz precisó que “Paul Fontaine y el señor Danús vendieron la mina aparentemente, dejaron a los trabajadores sin sueldo, en condiciones insalubres, hay unos pobres mineros ahí fondeados en un pique, hay huelga ilegal. Hay una situación inaceptable ahí”.

Los 73 mineros que están en huelga a 650 metros bajo tierra

Los mineros se han acomodado como pueden, utlizando cartones para intentar dormir pese al frío y la humedad. (Foto: EFE)

Pese a reconocer la gravedad del asunto, el gobierno asegura que no puede intervenir porque se trata de una empresa privada que es la que se debe hacer cargo de lo que adeuda.

El senador Navarro rechazó este argumento y subrayó que el yacimiento “fue entregado en concesión”, por lo que sostiene que el gobierno es también responsable.

Sin señales de los dueños

La empresa dueña de la mina es la carbonífera SW Curanilahue SA.

Hasta hace unos meses, los propietarios de la firma eran Rodrigo Danús y Paul Fontaine.

Los trabajadores le reclaman a Danús que dé la cara y haga los pagos correspondientes.

Pero Danús alegó que vendió su participación en la compañía en diciembre del 2014.

En su lugar, aparece como uno de los dueños Miguel Hernández, quien en un breve comunicado a la prensa señaló que el asunto está en manos de sus abogados.

Addiel Jara, portavoz de los mineros, denunció que “ellos (los empresarios) han desaparecido, andan arrancando y no hay caso que los puedan encontrar.

“A nosotros nos están debiendo el mes de julio y agosto, estamos dispuestos a pelear porque nos paguen agosto. Sí o sí”, le dijo Jara a la agencia de noticias EFE.

Los 73 mineros que están en huelga a 650 metros bajo tierra

Cuanto más bajen los trabajadores de la mina Santa Ana, más arriesgada será su situación. (Foto: EFE)

Jara coincide con el senador Navarro en que el gobierno tiene que intervenir, pese a que las autoridades nacionales les dijeron que no pueden hacer nada en contra de la empresa privada.

“Nosotros creemos que sí podrían hacer algo ya que esta mina fue financiada por la Corporación de Fomento (Corfo), entonces el Estado tiene un grado de responsabilidad de lo que está pasando ahora en Curanilahue”.

La Corfu es un organismo dependiente del Ministerio de Economía chileno que se encarga de apoyar el emprendimiento, la innovación y la competitividad en el país.

Condiciones insalubres

Mientras tanto, pasan los días y el estado de salud física y emocional de los mineros empeora.

El arzobispo de Concepción, monseñor Fernando Chomalí, quien actúa como mediador en el conflicto, fue testigo directo de las condiciones en las que están los trabajadores atrincherados en la mina.

La temperatura es inestable. Las corrientes de aire y las filtraciones de agua hacen que el lugar esté muy frío.

En el interior del yacimiento se producen gases tóxicos y explosivos, como el peligroso grisú.

Los 73 mineros que están en huelga a 650 metros bajo tierra

El senador Alejandro Navarro teme por la vida de los mineros y anticipa que si alguno fallece, “va a arder Arauco”. (Foto: EFE)

Organizaciones sociales les hacen llegar comida y el Servicio de Salud de Arauco instaló una enfermería a la salida de la mina.

Dicho organismo dio parte de problemas respiratorios, osteoarticulares, oculares, gastrointestinales y psicológicos entre los mineros.

Los cinco que tuvieron que abandonar la protesta fueron atendidos en el servicio de urgencias del Hospital Rafael Avaria, de Curanilahue.

Todo esto da fundamento a las palabras de preocupación del senador Navarro:

“Lo peor que le podría pasar al gobierno de nuestra presidenta Bachelet es que tengamos que sacar a un minero fallecido de la mina, porque va a arder Arauco”, vaticinó.

BBC Mundo