bajo precio petroleo

LONDRES (EFE Dow Jones)–Ahora que el crudo estadounidense ha marcado un nuevo mínimo de seis años justo por encima de US$40 por barril el miércoles, un creciente número de analistas y operadores aconsejan que nos preparemos para que el crudo baje a cerca de US$30 en breve.

Este precio, que no se ve desde el momento álgido de la crisis financiera, en febrero de 2009, podría alcanzarse ante la caída estacional de la demanda, que se une a los temores por la economía china y el persistente exceso de crudo a escala mundial. Un petróleo más barato sería positivo para los consumidores y las empresas, pero perjudicial para el presupuesto ruso y los productores de petróleo bituminoso estadounidenses. Además, pondrá a prueba los límites de las instalaciones de almacenamiento de petróleo en todo el mundo, llenas ya hasta el tope.

“En vista de dónde nos encontramos ahora, hay un 90% de probabilidades de que bajemos a los US$30”, indicó Chris Main, estratega de petróleo en Citigroup Inc.

En primavera, una recuperación del 40% dejó al petróleo por encima de US$60 por barril, lo que hizo creer que lo peor de las caídas de los precios en el último año había quedado atrás porque los inversionistas consideraron que los bajos precios provocarían reducciones de la producción lo suficientemente grandes como para equilibrar el mercado.

Pero el crudo vuelve a abaratarse. La semana pasada, la inesperada devaluación del yuan desató los temores a un aterrizaje forzoso de la economía de China, el segundo mayor consumidor mundial de petróleo. El mercado se prepara también para la llegada de millones de barriles de crudo iraní tras el acuerdo nuclear alcanzado entre las potencias mundiales y Teherán en junio, cuando se prometió la retirada de algunas sanciones al petróleo del país. Esto aumentará el exceso ya existente de esta materia prima por la mayor producción de Estados Unidos, donde se extrae ya a cerca de su nivel máximo en varias décadas, y de otros grandes productores.

“Estamos asistiendo al último acto del superciclo de las materias primas dirigido por China y eso está afectando al petróleo”, indicó Daniel Yergin, vicepresidente de IHS Inc, cronista desde hace tiempo de la industria energética. “Y con el actual exceso de oferta en el mercado y el espectro de la vuelta del petróleo iraní, ciertamente podríamos volver a los mínimos de la crisis financiera”.

El miércoles, el barril de West Texas Intermediate, barómetro de los precios en Estados Unidos, perdía un 4,41% a US$40,74. En diciembre de 2008, cayó por debajo de US$31.

Es cierto que la mayoría de los analistas sigue esperando que los precios toquen fondo pronto y se dirijan hacia US$70 por barril para finales del próximo año. Pero algunos vislumbran una lista de nuevas amenazas en los próximos meses, al término de la temporada de grandes desplazamientos por carretera por las vacaciones y cuando las refinerías estadounidenses, europeas y asiáticas retomen sus operaciones habituales de mantenimiento.

Carsten Fritsch, analista senior de materias primas en Commerzbank AG, cree que la próxima temporada de mantenimiento y los temores en torno al crecimiento en China podrían llevar al WTI fácilmente a los US$30 en los próximos meses. Y Andrew Lipow, presidente la consultora texana Lipow Oil Associates, cree que la presión sobre el crudo continuará hasta marzo.

El “escenario bajista” de Citi contempla una caída del WTI a en torno a US$33-US$31 por barril este año y durante gran parte de 2016.