Uno representa a los quechuas y el otro a los aimaras. A Juan Luque se lo identifica con un perfil emprendedor, en cambio, Aduviri lo arrastra la marca del aimarazo. Dos analistas toman el pulso a las opciones de ambos candidatos.

GR puno

Juan Luque Mamani (Pico) y Walter Aduviri Calisaya (Democracia Directa), irán a segunda vuelta en Puno. Ninguno de los dos alcanzó el 30% de los votos para ganar la presidencia regional de Puno. Según la Oficina Desconcentrada de Procesos Electorales (Odpe), al 99.38%, Juan Luque obtuvo 29.25 de los votos válidamente emitidos. Mientras que Aduviri alcanzó el 21.53 %.

Para ninguno la elección será fácil. El voto estará marcado por el componente étnico, político, social y las propuestas. El análisis de las posibilidades de ambos candidatos para el balotaje lo hizo el sociólogo Carlos Flores y el catedrático y comunicador Eland Vera.

Vera refiere que ambos candidatos representan un voto étnico que desplazó a los políticos criollos tradicionales. En ese marco cree que Aduviri, de procedencia aimara, representa a los marginados. Mientras Luque, quechua, personifica al hombre andino moderno. No cree que Aduviri, quiera ser un arcaico “si no lo que él pretende es alcanzar una propuesta de modernización revalorando las raíces originarias”.

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Carlos Flores, no le quita razón a Eland Vera, empero cree que la mejor manera de reivindicar a los pueblos originarios es con planes y proyectos de desarrollo concreto. “No se puede aspirar sólo a reivindicar a un sector. Alguien que postula a un cargo público está en la obligación  de desarrollar a toda la región  sin distinción. Eso pasa por generar oportunidades para todos. No se puede hacer política desde una perspectiva. A los quechuas y aimaras se les reivindica con planes y proyectos de desarrollo concretos”, precisó el sociólogo.

Flores, refiere que en campaña será un peligro para los dos candidatos apelar a la representación étnica. “Si fuese así, Luque, tendría las de ganar porque la zona norte de la región del Altiplano tiene más provincias que el sector aimara”, explica.

Eland Vera, en cambio, cree que el futuro presidente regional podría elegirse en base a un péndulo político bien marcado hace varios años. Cree que con la elección de Mauricio Rodríguez, la zona sur de Puno, colocó a la autoridad regional, razón por la cual ahora le toca al norte lo cual terminaría de favorecer a Juan Luque.

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Ambos coinciden que el aspecto étnico social es sólo un aspecto de esta nueva coyuntura. “En un nuevo proceso, habrá argumentos y discursos nuevos”, precisó Vera.

Flores,  de manera contraria, cree que “en este nuevo proceso, los electores más que el mensaje harán un análisis del candidato desde su perfil biográfico porque en juego está una serie de aspectos”.

Eland Vera, en contraposición, está seguro que la elección será más emocional que por propuesta porque hay temas de fondo irresueltos. Uno de esos aspectos es la falta re representación etnocultural.  Flores, por su parte, está seguro que los electores ahora no se dejarán mentir con discursos que siempre han estado en casi todas las campañas.

Vera, cree  que Aduviri, aceptará firmar una hoja de ruta, pero Flores, sostiene que esa probabilidad tiene que ser una certeza. “Se tiene que pensar en la región. Qué se hará con relación a la inversión en minería, el turismo, la formalización y la industria. Estos temas de todas maneras tienen que ser abordados”, refirió al recordar que Aduviri ha prometido profundizar la informalidad de estas actividades económicas.

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Los pasivos que los candidatos deben desprenderse

Luque Mamani y Aduviri Calisaya arrastran pasivos que podrían mellar su campaña. Según Eland Vera y Carlos Flores.  Aduviri, tiene el estigma de incendiario y radical por el aimarazo de 2011. Mientras que a Juan Luque, conocido por su espíritu emprendedor, no sabe expresar sus ideas. Viene de las canteras de la micro y pequeña empresa de Juliaca. Junto a su esposa trabajó en la fabricación de prendas. A Aduviri, no se le conoce ese perfil. Su imagen está asociada a protestas y paros. Pero mucho creen en el ímpetu de su juventud (34 años). Ambos provienen del ámbito rural, con estudios de doctorado. Juan Luque, fue rector de la Universidad Andina y Walter Aduviri, sólo se le conoce como trabajador público de municipios.

La República