Foto: La República
Redacción Sur.
El primer día del paro macrorregional de 48 horas, en respaldo a la protesta indefinida que inició hace más de 60 días el valle de Tambo en Islay – Arequipa, contra el proyecto minero Tía María de la empresa Southern, se desarrolló entre marchas y bloqueos humanos de vías. Ello impidió el normal tránsito de las personas y vehículos en las regiones de Arequipa, Moquegua, Tacna y Puno.
En Arequipa, muchos comercios cerraron por temor a ser dañados, como ocurrió en el paro de 72 horas que se desarrolló entre el 12 y 14 de mayo.
Por precaución, tampoco circularon gran parte de vehículos del transporte público, pese a que los gremios que los agrupan dijeron que no se sumarían a la protesta.
Mientras que en Tacna y Puno, los principales afectados por la protesta fueron los turistas, quienes no pudieron movilizarse por la falta de transporte. En Tacna, los visitantes chilenos no pudieron retornar con normalidad a su país por la falta de transporte; en el caso de Puno se cancelaron decenas de paquetes turísticos a las islas de Los Uros, Taquile y Amantani.
Protesta se calentó
Arequipa fue el centro de la protesta contra Tía María, y tuvo como principal zona de concentración el Cono Norte de la ciudad, donde se desarrollaron movilizaciones e incluso conatos de enfrentamiento con la Policía.
En esta zona la paralización inició a las 8.30 horas, cuando un grupo de 300 pobladores agremiados al Frente de Defensa de los Intereses del Cono Norte (Fredicon), tomaron el puente Añashuayco, en el distrito de Cerro Colorado. Esta es la vía de ingreso de los vehículos de pasajeros y carga que llegan desde Puno y Cusco. El puente permaneció cerrado una hora y media. Un grupo de 200 policías despejó la vía sin tener resistencia.
Tras ello, los pobladores del Cono Norte empezaron a marchar. Al promediar el mediodía, cuando la movilización estaba cerca al Aeropuerto Internacional Rodríguez Ballón, la Fiscalía y la Policía intervinieron a Lenin Huamani (22), por portar piedras. Fue llevado hasta la dependencia de Seguridad del Estado, donde se procedió a identificarlo, luego quedó en libertad.
Este hecho provocó que un grupo de manifestantes se dirigiera a la comisaría de Zamácola para pedir la libertad de Huamani. Para llegar al lugar pasaron por la vía de ingreso al aeropuerto, lo que causó que la Policía lance tres bombas lacrimógenas para dispersarlos.
Mientras esto ocurría en el Cono Norte, un grupo de manifestantes encabezados por estudiantes y trabajadores de la Universidad Nacional de San Agustín (Unsa), marcharon por la avenida Independencia.
Otro grupo se desplazó por las vías del Centro Histórico hasta llegar a la Plaza de Armas. Entre los manifestantes estuvieron los integrantes de Construcción Civil, quienes en el paro de 72 horas del pasado 12 de mayo, fueron denunciados por causar daños a la propiedad pública y privada, con los palos que portaban.
En esta ocasión salieron sin objetos contundentes. El secretario regional, Jhonny Toro, indicó que ellos marchan pacíficamente y no son delincuentes. En la Plaza de Armas también se movilizaron integrantes de Juventud Socialista, quienes estuvieron acompañados de una comparsa musical y bailarinas.
La protesta en Arequipa llegó a su epílogo pasada la una de la tarde, cuando en la Plaza de Armas se presentaron los congresistas de la bancada de Dignidad y Democracia, Justiniano Apaza y Jorge Rimarachín, ambos respaldaron el paro, pidieron se cancele Tía María y que se levante el estado de emergencia en Islay.
Cacerolazos en Islay
La población del valle de Tambo, pese al estado de emergencia, también hizo sentir su presencia en el paro. Desde las 18.00 horas, cientos de pobladores de los distritos de Punta de Bombón, Cocachacra y Deán Valdivia participaron de un sonoro “cacerolazo”.
“No tenemos miedo a que nos arresten porque estamos dentro de nuestras casas”, señaló una pobladora de Cocachacra, quien desde el techo de su vivienda hacía ruido con sus ollas.
El “cacerolazo” se prolongó más de una hora.
Al respecto, el jefe de la Región Policial de Arequipa, general PNP Luis Enrique Blanco, dijo que los cacerolazos pueden realizarse, pero dentro de las viviendas. “Si están en las calles serán detenidos”, advirtió.
Moquegua, Tacna y Puno
En Moquegua el primer día de paro se caracterizó por movilizaciones de organizaciones sociales y gremiales por las principales calles. Fueron unos 3 mil manifestantes quienes se movilizaron y llegaron, después del mediodía, hasta el puente Montalvo, en la carretera Panamericana Sur. Esta vía permaneció cerrada cerca de tres horas.
Hasta la zona se trasladó el jefe de la Región Policial, Eduardo Solís, y el fiscal de Prevención del Delito, Manuel Bernedo, quienes junto a un contingente policial lograron despejar el puente sin mayor problema.
Para hoy, la Dirección Regional de Educación dispuso que solo se suspenda el dictado de clases en los distritos de Moquegua y Samegua de la provincia de Mariscal Nieto.
Mientras que en Tacna la paralización tuvo el apoyo de diferentes gremios, como del transporte urbano, Construcción Civil, el colectivo feminista Takana Warmi, el Movimiento LGTB y la Junta de Usuarios del Valle de Uchusuma. Todos marcharon por las principales calles y avenidas de la Heroica Ciudad.
En la región Puno la paralización se caracterizó por el bloqueo de vías. En Juliaca los pobladores cerraron los principales accesos. Además quemaron llantas y rompieron botellas de vidrio para evitar que los vehículos circulen.
Los bloqueos causaron accidentes, como el ocurrido con el vehículo de placa X1J-826. El chofer de esta unidad no se percató de un montículo de tierra que los huelguistas colocaron y chocó contra éste. Asimismo, en la vía de salida a Cusco, un ómnibus de la empresa Transzela colisionó contra un poste de alumbrado público cuando intentaba huir de los piquetes.
Cusco se suma al paro
Ayer los cusqueños no acataron el paro. El secretario de la Federación Departamental de Trabajadores del Cusco (FDTC), Wilfredo Álvarez, indicó que para hoy recién se prepara una gran movilización.
Investigados por muerte de PNP
Los dirigentes que encabezan la protesta en contra del proyecto minero Tía María, Pepe Julio Gutiérrez, Jesús Cornejo y Jaime de la Cruz, son investigados por el delito de homicidio calificado.
Fuentes del Ministerio Público indicaron que la fiscal penal de Islay, Yecid Zevallos, decidió ampliar la investigación en contra de los dirigentes por bloqueo de vías ocurridos durante el paro indefinido en Tambo.
Ahora se les acusa -además- de presuntamente haber inducido a que los manifestantes, el pasado 6 de mayo, agredieran en el valle de Tambo al suboficial PNP Alberto Vásquez, quien murió a causa de la golpiza que le propinaron.
ENFOQUE
El Sur está descontento Con Humala
Nilo Cruz
Analista
En esta protesta se juntan varias cosas. Por un lado están los que creen que el proyecto Tía María no debe ir. También se han plegado los que creyendo en la coexistencia de la mina con el agro, empiezan a dudar de la palabra del gobierno, porque éste no quiere someter el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto, que ya está aprobado, a la Unops. El gobierno dice que sus técnicos ya levantaron todas las observaciones, cosa que no muchos creen por la falta de transparencia del gobierno. En ese contexto, lo saludable es una suspensión temporal indefinida de Tía María, mientras no haya una calificación neutral e independiente.
Por otro lado, esta protesta refleja el descontento del Sur en relación al gobierno de Humala. El Sur lo respaldó en la campaña, sin embargo no hay ningún proyecto grande para esta zona del país. No se pide favoritismo, sino equidad con el Norte. Hay descontento de ese tipo que se mezcla con el reclamo por Tía María. Eso es peligroso. El gobierno debe actuar con transparencia y cumplir sus promesas.
La República