En entrevista con El Comercio, Eleodoro Mayorga habla sobre la posible eliminación de permisos ambientales y otros temas
¿Cuáles son los encargos que le ha dado el presidente?
Su gran preocupación es concluir los proyectos importantes de infraestructura del sector: el gasoducto, la refinería de Talara y relanzar la inversión en minería y la exploración y el desarrollo petrolero.
¿No se volverá a cambiar la fecha del proceso para la concesión del gasoducto del sur?
Hemos revisado el trabajo que se ha venido haciendo y confirmamos que de todas maneras el proyecto se adjudicará en junio de este año.
Se habla mucho del gasoducto y poco de la petroquímica. ¿Se ha abandonado esta posibilidad?
Nunca se abandonó. El problema está en que manejar el etano [insumo de la petroquímica] tiene sus complicaciones. Técnicamente puede venir por el gasoducto pero si se logra construir un poliducto paralelo, es mucho más fácil.
Eso no está en el proyecto actual.
No, estamos preguntando a los diferentes postores [del gasoducto al sur] la idea de poner un poliducto opcional, no podemos incluirlo al proyecto porque no conocemos hasta hoy cuántos líquidos los productores estarán dispuestos a entregar al mercado, entonces no sabemos el diámetro o las características del poliducto. Por eso estamos abriendo dentro del proceso una opción según la cual, a costo y riesgo del productor, el que gane la concesión construirá en paralelo este poliducto.
¿No se ha apresurado al anunciar la eliminación de algunas licencias ambientales cuando aún no se había llegado a un acuerdo con el Ministerio del Ambiente?
Efectivamente, no habíamos terminado el trabajo de preparación del reglamento [ambiental de hidrocarburos] pero ya habíamos avanzado sustancialmente. Evidentemente el manejo ambiental está del lado del Ministerio del Ambiente pero queremos ser competitivos, queremos relanzar los procedimientos de exploración y producción. Todos reconocemos que el reglamento necesita modificarse.
Pero a pocos días de asumir el cargo usted sale con un anuncio de este calibre…
Con el ministro del Ambiente ya habíamos tenido una reunión de trabajo. Vimos el avance y dimos cuenta de que estamos muy cerca de culminar ese trabajo. Yo reconozco que efectivamente se requiere la coordinación más estrecha, quizás me apresuré en decir las cosas, que había un acuerdo con el Minam, pero al margen del tema de forma creo que lo importante es el tema de fondo.
¿Después de su declaración ha conversado con el ministro del Ambiente?
Ha estado fuera de Lima. De todas maneras nos vamos a sentar, porque tenemos el compromiso de sacar esto adelante.
¿Hay presión por parte de los petroleros de sacar esto rápidamente?
Yo no diría que hay presión, yo creo que tenemos ya un embalse, la prueba es que perforamos entre siete y ocho pozos por año y para encontrar petróleo hay que perforar por lo menos 10. Hay más de 30 contratos en fuerza mayor y casi la mitad de esa fuerza mayor debido a estas razones de procedimientos de estudios de impacto ambiental.
¿Aún es partidario de la exportación de energía a Chile?
Soy partidario de tener un planeamiento energético de mediano y largo plazo que nos permita ver qué demanda de gas tenemos. En la medida que esta demanda esté cubierta y que la exploración dé resultados satisfactorios generando nuevas reservas, habrá un excedente exportable.
¿Pero en sus cálculos habrá o no excedentes?
Por lo menos el potencial de recursos que tenemos es muy significativo. Ahora el caso de Chile hay que verlo desde una óptica de mejoramiento de las relaciones. Es obvio que con el fallo de La Haya y el hecho de que se esté implementando en tiempo récord ayuda a pensar en esta exportación, pero aún estamos muy lejos de la decisión, primero hagamos el gasoducto.
¿En serio cree que Petro-Perú llegará a ser como Ecopetrol?
Por supuesto que sí, o usted no cree que podamos jugar fútbol también igual que los colombianos.
Ellos sí están en un Mundial. ¿Cuál será la fórmula?
Vamos a trabajar en eso. Una vez que se apruebe el reglamento de la ley de modernización y tengamos una definición muy clara, Petro-Perú va a poder ver y definir un plan de mediano y largo plazo dentro de los parámetros acordados. La idea es que comience poco a poco a tener una participación privada y que esta participación agregue valor a través de proyectos que permitan mejorar la caja de la empresa y no comprometa el repago del proyecto de refinación. Esa será un poco la línea estratégica.
El Comercio