mentores y padrinos

Por Patricia Cánepa*

He escuchado sobre la importancia de tener mentores para lograr el éxito profesional; de hecho, mi empresa implementó un programa de mentoría, pero ahora se habla mucho de los “sponsors”.  ¿Cuál es la diferencia y qué tan necesario es tener uno?

Sylvia Ann Hewlett, autora de “Forget a Mentor, Find a Sponsor” hace la siguiente diferencia: un mentor aconseja, mientras que unsponsor (o padrino), actúa.

Un mentor es una persona influyente -usualmente dentro de la empresa- a quien admiras y en quien confías, con mucha experiencia, conocimiento profundo de la cultura y del “teje y maneje” de la organización. Como tal, puede ayudarte a pensar sobre tus planes de carrera, cómo llevarlos a cabo. Te puede abrir puertas, ayudarte a pensar y evitar “metidas de pata”.

Un sponsor es también un ejecutivo de alto nivel y experiencia, quien te apadrina, te da visibilidad y te promueve abiertamente, a veces sin que lo sepas.

En mi opinión, no son necesariamente mutuamente exclusivos. Un mentor de alto nivel puede convertirse en tu sponsor, en tu mejor aliado y, como tal, auspiciar tu carrera y promoverte.

Al mentor sueles escogerlo tú, sin que necesariamente lo sepa -a no ser que se trate de un programa auspiciado por la empresa. Los sponsors suelen escogerte porque ven tu potencial o porque la empresa se lo impone.

Conozco el caso de un sponsor que, viendo el potencial de un joven, sugirió su nombre para que lidere un comité, luego sugirió que participe en un selecto taller de liderazgo y, cuando un periodista le preguntó a quién podría recomendar para entrevistar en su columna, sugirió el nombre de este joven. Con solo unas palabras, ayudó a esta persona a lograr una visibilidad que difícilmente hubiera podido lograr solo.

Un buen mentor puede hacer lo mismo. Ambos son parte importante de tu círculo de influencia si lo que buscas es el éxito profesional. Recuerdo haber leído sobre algún estudio que concluía que los más exitosos habían tenido mentores y, aunque no he visto cifras sobre los sponsors, me imagino que los resultados seguirían la misma línea.

Ya sea que tengas un mentor y además un sponsor, o que se trate de la misma persona, la clave de estas relaciones es contar con quienes tienen un genuino interés en ti, de tal manera que les nazca pensar en ti y en cómo pueden ayudarte a obtener más visibilidad y mayores oportunidades para mostrar tu talento.

Lograr esto no es fácil porque no estamos hablando de preferencias. Nadie va a invertir ni apostar por ti si no te lo ganas. Tienes que destacar (por tu actitud, por tus logros, por tus ganas de aprender, etc.) para hacerte notar y ganarte el respeto profesional y confianza de quien te auspicie, cuidando mucho de estar siempre preparado y no abusar de su preciado tiempo ni de la relación.

*Soy Directora, Coach Ejecutivo y Consultora Ascociada en LHH-DBM Perú (lhh.pe), empresa líder en transición laboral y desarrollo del talento. En este blog, responderé dudas y consultas sobre el trabajo, el desarrollo de la carrera, el liderazgo y la empleabilidad. Me formé como marketera en Procter & Gamble Perú y empecé mi carrera en banca. Soy y he sido miembro de varios directorios sin fines de lucro, incluyendo AWLC, OWIT Perú, la Sociedad Peruana de Marketing, el Colegio San Silvestre, entre otros. Soy autora del libro “Marque la Diferencia: guía práctica de desarrollo profesional” y expositora sobre temas de desarrollo ejecutivo. Fui columnista por 4 años en temas de marketing personal. Seguí un Programa de Dirección General del PAD de la Universidad de Piura y tengo una Maestría en Negocios Internacionales de Thunderbird en Arizona y un B.A. en Ciencias Políticas de Pitzer College en Claremont, California. @patriciacanepa www.facebook.com/PatriciaCanepaCori

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