El ministro del Interior de Perú, Mauro Medina, aseguró el martes que el oro que se extrae de la minería ilegal de la región amazónica de Madre de Dios se exporta a través de las fronteras de Brasil y Bolivia.

Los informes de inteligencia de la policía señalan que el oro que extrae la minería ilegal de Madre de Dios sale por Brasil y por Bolivia, por lo que viene trabajando en conjunto con la policía de esos dos países para cerrarles el paso“, dijo el ministro en conferencia con la prensa extranjera en Lima.

La policía capturó este año a varias personas trasladando lingotes de oro hacia el aeropuerto internacional de Lima para sacarlo del país, pero además se decomisaron en los depósitos de aduanas barras de oro ilegal, informó la policía.

“El objetivo de la minería ilegal es crear su ruta terrestre en el Perú, para poder sacar el oro por el aeropuerto”, precisó Medina.

El ministerio tiene listo un operativo para intervenir en “La Pampa”, localidad que concentra la mayor cantidad de mineros ilegales de Madre de Dios, como parte de un plan estratégico con los ministerios de Ambiente y de Energía y Minas, reveló el responsable peruano.

“El plan multisectorial tiene que ser una válvula de escape para las miles de personas que trabajan en La Pampa, se debe evitar un costo social”, agregó durante la reunión con la prensa extranjera.

En La Pampa hay decenas de campamentos mineros, donde además de minería ilegal, existe trata de personas, tráfico de droga, prostitución y explotación de menores, entre otros delitos.

La deforestación causada por la minería ilegal en Madre de Dios se triplicó en los últimos años, al pasar de 5.000 a 17.000 hectáreas entre 2001 y 2016.

Los miles de mineros ilegales emplean dragas, dinamita y mercurio para extraer el oro, sembrando destrucción y contaminación, según las autoridades.

Las autoridades peruanas estiman que organizaciones criminales ganan unos 2.600 millones de dólares al año, a partir de la producción y venta del oro extraído ilegalmente en la amazonía.

En mayo de 2016, el gobierno del entonces presidente Ollanta Humala declaró en emergencia a Madre de Dios por la contaminación, después de que las autoridades “detectaron mercurio en las aguas de los ríos, en las especies hidrobiológicas y en la población, con valores superiores a los límites máximos permisibles”.

Sin embargo, dos años después las autoridades locales se quejan de que no se ha hecho nada para remediar la situación.

Fuente: eleconomista.es