Foto: Perú 21

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La comercialización del gas licuado de petróleo (GLP) sigue generando preocupación entre los consumidores finales. El último reporte del INEI establece que el precio promedio de un balón de gas de 10 kilos se vendía en S/.36,51 como promedio. Sin embargo, basta una llamada a alguna firma comercializadora para comprobar que el precio puede llegar a los S/.40.

Luego de la crisis de desabastecimiento por problemas con el ducto de Camisea y oleajes que obstaculizaron la importación, el precio promedio se disparó a S/.38,26. En la actualidad, Héctor Plate, presidente del Organismo Peruano de Consumidores y Usuarios (Opecu), proyectó que el precio debería estar por debajo de los S/.35, si tomamos en cuenta la caída del precio del petróleo y el hecho de que gran parte del GLP proviene de Camisea.

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Justamente, el presidente de la Asociación de Plantas Envasadoras de Gas (Aseeg), Abel Camasca, hace mención que el precio del GLPque arriba desde Camisea es de S/.1,47 el kilo o S/.14,7 el balón de 10 kilos. “A ese precio, hay que agregarle los gastos de flete, de comercializar, lo que nos hace pensar que el precio puede duplicarse pero en realidad sube hasta 300%”, comentó.

La respuesta para Renzo Lercari Carbone, presidente de la Asociación de Grifos y Estaciones de Servicio del Perú (Agesp), es que existe una demanda que viene creciendo y que no es acompañada por un crecimiento de la oferta. Macroconsult advirtió que la producción de líquidos de gas natural de Camisea (principal insumo del GLP) ha alcanzado ya su tope máximo.

MERCADO

Entre el 2006 y el 2015, el consumo nacional de GLP ha crecido cerca de 150%, según Macroconsult. Un 88% de familias utiliza el balón de gas para cocinar y existen edificios residenciales que tienen sistemas de provisión de GLP a granel. Sobre este último, el consultor en temas de energía Rafael Laca comentó que las normas de construcción vienen exigiendo que los nuevos edificios sean abastecidos de GLP o gas natural, lo que masificará aún más su uso.

Fuente: El Comercio