Grana y Montero

En lo que va del año las acciones de Graña y Montero han registrado una caída de 18.9%. Creemos que este retroceso está sustentado en: i) la salida de capitales de mercados emergentes; ii) las menores perspectivas de crecimiento para la economía peruana; iii;) el retraso en la firma de proyectos anunciados en el IPO; y, iv) la abstención del consorcio que conformaba la compañía de participar en la licitación de la Línea 2 del Metro de Lima (US$ 5,800 MM).

Sobre la Línea 2, destacamos que ésta no se encontraba en el backlog de la empresa, por lo que la abstención de la participación de la compañía no representa cambios en sus fundamentos. Sin embargo, creemos que habían inversionistas que tenían considerada esta participación y una probable adjudicación de la buena pro del
proyecto, lo que provocó una reacción negativa en el mercado.

Sobre los proyectos anunciados en el IPO (Vía Expresa Sur – US$ 230 MM, Javier Prado – US$ 800 MM, Cuartel San Martín – US$ 700 MM) solo se ha firmado a la fecha el de la Vía Expresa Sur. En los otros proyectos han habido retrasos, pero esperamos la aprobación de la Vía Expresa Javier Prado por parte del MEF en los próximos meses. El proyecto del Cuartel San Martín debe tomar más tiempo dado que aún se encuentra en etapa de permisos. Resaltamos que estos proyectos no se encuentran incluidos en nuestro VF, por lo cual representarían un upside adicional para la compañía.

Los fundamentos de Graña y Montero se mantienen sólidos. Es cierto que la desaceleración de la economía se ha visto sustentada en un crecimiento de la inversión y de la construcción menor al esperado. No obstante, la empresa ha mejorado significativamente sus márgenes en el 2013, lo cual creemos que puede compensar menores tasas de crecimiento, sin afectar la generación de valor.

Adicionalmente, la empresa aún se mantiene activa en la búsqueda de crecimiento inorgánico (adquisición en marzo del 51% de COGA por US$ 25.5 MM) y de participación en proyectos fuera del Perú (diversificación geográfica).

En conclusión, creemos que la caída del precio de la acción se debe principalmente a la coyuntura del mercado. Por tanto, mantenemos nuestro VF de S/. 11.15, pero cambiamos nuestra recomendación de mantener a comprar.

Destacamos el riesgo del sector construcción y riesgo de ejecución en los proyectos, pero pensamos que hay un upside atractivo si se consideran los proyectos antes mencionados en el VF y el potencial de los US$ 18,300 MM en proyectos que la compañía tiene en evaluación.

Kallpa SAB