El precio del petroleo casi se triplicó desde el 2016 hasta la fecha y se acerca a los 100 dólares el barril, la situación se torna incomoda para las industrias petroleras debido a las tensiones políticas que influyen y preocupa a la población ya que la alza afecta, sobre todo, a las economías más pobres.

Abishek Deshpande, analista de JP Morgan asegura que el precio del llamado también “oro negro”subió cuando Washington restableció las sanciones contra Irán el 7 de agosto de 2018.

“Pese al aumento de la oferta, especialmente en Estados Unidos, los precios pueden seguir subiendo porque nadie se atreve a tocar los barriles iraníes por temor a las sanciones estadounidenses”, asegura Deshpande.

Además de la inestabilidad política, otro factor que influyó en el aumento de precio fue la caída de las reservas mundiales de crudo, que alcanzaron niveles récord en los últimos años pero disminuyeron con fuerza cuando la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios limitaron la producción en los primeros meses del 2017.

Ver también:  Producción de petróleo creció 24% en febrero

Con respecto al pronóstico del valor del petroleo en los próximos meses, no se tiene un panorama claro ya que grandes dirigentes de grupos petroleros no se atreven a dar una respuesta definitiva.

El directivo del grupo británico BP, Bob Dudley, afirmó que no prevé que los precios se mantengan en 85 dólares, nivel en torno al cual se sitúa actualmente el barril de Brent, el crudo de referencia en Europa.

“Puede subir o bajar, el precio podría evolucionar en los dos sentidos según las decisiones o los anuncios”, consideró Dudley.

Fuente: la República