El concesionario del puerto de Yurimaguas prevé invertir US$66 millones en las dos etapas por desarrollar. (Foto: Copam)

El concesionario del puerto de Yurimaguas prevé invertir US$66 millones en las dos etapas por desarrollar. (Foto: Copam)

Las obras de construcción del puerto de Yurimaguas (Loreto) –en el que se invertirán unos US$66 millones– tienen un avance de 20%, con lo cual se prevé que el inicio de operación del primer puerto fluvial concesionado del país será en julio del próximo año, informó Carmen Benítez, gere

Sin embargo, la buena noticia del avance de obras se ve opacada por las dudas que genera en el concesionario la demora en la concesión de la hidrovía amazónica. Esto porque el escenario planteado para la concesión del puerto de Yurimaguas –en el 2011–  era que este debía mover carga pesada internacional proveniente de Ecuador, Colombia y, principalmente, de Brasil, además de la demanda local. Para ello, el Estado garantizó la navegabilidad los 365 días del año de los ríos Marañón, Ucayali, Huallaga y Amazonas –con la hidrovía– en un plazo máximo de 7 años. Pero, salvo que ocurra un milagro, este plazo no podrá ser cumplido.

Y es que tras la súbita cancelación del concurso por la hidrovía (el 5 de febrero), el proyecto volvió a fojas cero y tiró por tierra las pocas opciones que había de que el puerto opere a su real capacidad: 600.000 toneladas de carga al año en su primera etapa. Así, el eje intermodal amazonas norte –compuesto por el Puerto de Paita, IIRSA Norte, el puerto de Yurimaguas y la hidrovía– seguirá incompleto por algunos años más, pues según una fuente no oficial de Pro Inversión, el inicio de un nuevo concurso para la concesión de la hidrovía deberá esperar primero a que se realice la consulta previa a las poblaciones del área de influencia del proyecto.

En este nuevo escenario, Benítez considera que es “importante dialogar con el Estado y buscar alternativas de solución que nos permitan el desarrollo del nuevo terminal portuario”.

Si bien la empresa no lo dice, se puede deducir que su preocupación pasa porque el esquema financiero con el cual ofertó por el puerto preveía ingresos superiores al mínimo garantizado por el Estado en su PAMO (pago por mantenimiento y operación) de US$2,71 millones al año.

¿Eso obliga al Estado a pensar en alguna compensación especial? Si bien el titular del sector, José Gallardo, ha reconocido la importancia del puerto de Yurimaguas, el Ministerio de Transportes respondió sobre este punto que “no hay obligación contractual respecto de garantizar el desarrollo de operaciones [del terminal portuario] hacia Brasil”.

RENTABILIDAD SOCIAL
Independientemente de si hay obligación contractual o no, la lógica dice que el Estado ha decidido cofinanciar la carretera IIRSA Norte, el puerto y la hidrovía (de concretarse la concesión) en aras de mejorar la calidad de vida de los habitantes de las regiones del nororiente del país, además de mejorar la competitividad de sus productos. Pero el círculo virtuoso previsto con el eje intermodal se trunca sin hidrovía, mas no así las obligaciones monetarias del Estado con los concesionarios.

Pero si bien la potencial carga extranjera que pueda absorber el puerto está por ahora en stand by, sucede todo lo contrario con la carga local. La ejecutiva refiere que desde el año pasado iniciaron la gestión comercial con las principales petroleras de su área de influencia. “Ellos están esperando poder contar con la infraestructura que garantice la seguridad de sus cargas”, comentó Benítez.

Adicionalmente, el concesionario retomará los contactos con empresarios de Manaos (Brasil) que están interesados en tener un corredor de salida hacia el Pacífico vía nuestro país.

El Comercio