Los retos fiscales para el país son elevar la inversión pública a tasas de dos dígitos y mejorar la recaudación fiscal con medidas administrativas

Aún no se oficializan todos los datos económicos del Perú al cierre del 2017; sin embargo, los retos fiscales que deberá afrontar en materia fiscal son previsibles de cara a los próximos años relacionados a la recaudación fiscal y la inversión pública.

De acuerdo al Área de Estudios Económicos del BCP, son tres los retos fiscales de corto y mediano plazo que el gobierno deberá asumir.

Inversión pública

El ritmo de crecimiento de la inversión pública debe ser mayor a tasas de dos dígitos durante el 2018, pues si no crece por encima del 10%, la brecha de producto negativa continuará sin cerrarse.

Mayor recaudación

Entre el 2012 y 2017 los ingresos fiscales cayeron 4,8 puntos porcentuales del PBI. Para este 2018, para elevar de manera sostenible la baja recaudación fiscal no será suficiente con el impacto positivo en los ingresos fiscales por la mejora de los precios de los metales; sino que se requerirá medidas administrativas y de política tributaria.

Menor déficit

Según el BCR, el déficit fiscal del 2017 representó el 3,2% del PBI, su mayor nivel en 17 años; así como los ingresos corrientes del gobierno central cayeron hasta 18% del PBI, su menor nivel en 14 años. Así, se debe reducir el déficit fiscal de 3,5% del PBI en el 2018 al 1% en el 2021. Para ello se deberán contener las iniciativas de gasto provenientes del Congreso y el Ejecutivo, además de elevar los ingresos fiscales.

El Área de Estudios Económicos del BCP también señala que es necesario mejorar la calidad del gasto público; así como la priorización de los proyectos de inversión pública y asociaciones público privadas (APP).

Fuente: El Comercio