La preocupación de los campesinos quedó registrada en cartas dirigidas a la Gobernación de Puno y el frente policial. (Foto:Rigoberto Huanca/La República)

PEDIDO. Efectivos policiales serán enviados a zonas vulnerables. (Foto:Rigoberto Huanca/La República)

La preocupación de los campesinos quedó registrada en cartas dirigidas a la Gobernación de Puno y el frente policial.

Puno. El Frente Policial de Puno anunció en la víspera que reforzará la seguridad en los puestos de vigilancia de Desaguadero, Huacullani, Zepita y Kelluyo. En estas zonas los campesinos revelaron ser objeto de amenazas. Explicaron que varias personas les exigen participar en marchas de rechazo a la gran minería. Si no apoyan los amenazan con quitarles sus animales y propiedades.

Un sector de campesinos está en contra de las protestas. Argumentan su posición en que los dirigentes aprovechan políticamente las marchas para luego tentar un cargo público. La preocupación de los campesinos quedó registrada en cartas dirigidas a la gobernación de Puno y el frente policial.

Gregorio Mamani Flores, secretario de organización de la Asociación de Prendas Menores de Desaguadero, señaló que de ser necesario apoyarán en la alimentación de los efectivos. El recuerdo del “Aimarazo” en marzo del 2011 es un motivo para el rechazo.

Recordó que el tiempo que duró la huelga la población no tenía qué comer. La medida de fuerza les generó pérdidas, de las cuales solo se recuperaron seis meses después. La Cámara de Comercio de Puno también se solidarizó con el pedido.

La República