Empresario Roque Benavides dijo que Buenaventura consideró conveniente separar los roles de CEO y presidente del directorio
La Compañía de Minas Buenaventura S.A.A anunció hoy mediante un Hecho de Importancia publicado en la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) que el ejecutivo Roque Benavides Ganoza renunció a la gerencia general de la minera y que traspasará la posición a Víctor Gobitz Colchado el 2 de enero próximo.
¿Por qué deja la gerencia general?
Yo he sido gerente general durante 16 años y desde 2011 soy presidente del directorio y gerente general. Somos una empresa que se preocupa mucho por las mejores prácticas de gobernanza corporativa. En ese sentido, es deseable que el rol de presidente del directorio sea distinto que el rol de gerente general y que sea llevado (adelante) por distintas personas. Así que, esa es la motivación. El directorio de Buenaventura considera conveniente separar los dos roles.
¿Por qué ahora?
Se ha venido trabajando hace muchos años. No es un proceso de un día para otro. Es en realidad un proceso de selección de un nuevo gerente general para una compañía como Buenaventura. Toma su tiempo. Hemos venido trabajando en esto en los últimos dos años.
¿Qué perfil posee Víctor Gobitz que lo hace ideal para el cargo?
Es un ingeniero en minas con más de 25 años de experiencia, que no solamente ha trabajado en Perú, sino en Colombia, Brasil y Chile, y para varias empresas mineras de distinto corte, con minería a tajo abierto y subterránea. Es un profesional de gran reputación. Tiene además una maestría y ha tenido cursos ejecutivos en varias universidades americanas.
¿Qué le aporta a la continuidad de la compañía?
Buenaventura siempre ha sido una empresa muy orientada a los aspectos técnicos mineros. En ese sentido, un hombre formado en la universidad católica, un ingeniero en minas, es el perfil que nosotros consideramos pues hay que entender que la minería es esencialmente eficiencia en las operaciones. Creemos que un hombre del perfil de Víctor Gobitz podría contribuir a buscar esa excelencia de las operaciones. Él le agrega este adicional de juventud por lo menos relativa al que habla. (N.R.Gobitz tiene 52 años y Roque Benavides, 62).
El Comercio