En problemas. Rubén Américo Soto Soto, natural de Parcona, consideró injusta su reclusión. Dijo que se tomará un tiempo para hablar del caso. Foto: Gil Vargas

En problemas. Rubén Américo Soto Soto, natural de Parcona, consideró injusta su reclusión. Dijo que se tomará un tiempo para hablar del caso. Foto: Gil Vargas

Incidente. Detenido durante los atentados contra la minera china señaló ante el juez que fue contratado como seguridad por 100 soles diarios. Shougang lo desconoce como tal.

Un enrevesado caso que denotaría la contratación de un grupo de personas para crear desmanes durante la huelga de trabajadores y pobladores de San Juan de Marcona no termina por aclararse.
La persona involucrada en este oscuro hecho es Rubén Américo Soto Soto, de 38 años. Él fue aprehendido por la Policía el 25 de mayo, cuando una turba saqueó y quemó las instalaciones de la minera Shougang Hierro Perú después de que la población tuviera un enfrentamiento con los agentes y resultara impactado de muerte un poblador.
Al momento de ser intervenido Soto llevaba consigo un friobar, una maleta de viaje que contenía artículos electrónicos y ropa. Además portaba  1,575 soles en efectivo.
En la comisaría iqueña de San Juan de Marcona declaró que había sido contratado por un ingeniero de apellido Arévalo para que preste seguridad a Shougang desde el 19 de mayo, con un salario de 100 soles diarios. Dijo que, como tal, estaba cumpliendo su labor cuando encontró los enseres fuera de las instalaciones de la compañía y se aprestaba a entregarlo.
Esta declaración no convenció a la fiscalía que lo acusó de hurto agravado en agravio de la minera china y por el delito de disturbios en perjuicio del Estado, y solicitó prisión preventiva de siete meses para él y otros tres coacusados.
Ante el Juzgado Mixto e Investigación Preparatoria de Marcona, Soto dio más detalles. Refirió que el trato para prestar sus servicios fue verbal y que el pago era directo.
Cuando el juez Leodan Cristóbal Ayala le preguntó sobre el tipo de trabajo que realizaba. Su respuesta fue: “Contrarrestar a los huelguistas y proteger las oficinas, los locales de la empresa…”.
Soto fue confinado preventivamente en el penal Cristo Rey de Cachiche. Los otros tres coacusados tienen mandato de comparecencia restrictiva La República fue hasta el  penal iqueño en busca de la versión del recluido, pero este prefirió guardar silencio.
“Quiero tomarme un tiempo para hablar”, indicó.
Esta decisión también fue expresada por sus familiares en casa de su padre, en Parcona.
¿DOS VERSIONES?
Rubén Soto Soto habría dado, en la comisaría, una primera versión muy distinta a la que aparece en el expediente. Así lo indica el abogado Freddy Ríos Lima, quien lo asistió inicialmente.
“Yo fui a la comisaría como abogado de las otras tres personas. Soto ya había declarado sin abogado, entonces le ofrecí asesorarlo gratuitamente. Me respondió que estaba llamando a Arévalo, pero que no le respondía. Leí rápidamente su declaración y decía que había sido contratado por Arévalo para hacer desmanes y que pagaban 200 soles a los que tenían armas. Al día siguiente, el técnico Bejarano me pide que ponga mi firma para cumplir con la formalidad. Previamente lo leo y veo que ya no estaba la declaración anterior”, afirma Ríos Lima.
El suboficial Álvaro Bejarano rechazó esta aseveración.
El abogado también refirió otro hecho que llama la atención. Se trata del atuendo de Rubén Soto al momento de su detención: Vestía short y polo, y no el uniforme que llevan los trabajadores de seguridad de la empresa minera.
“NUNCA LO HEMOS VISTO”
El jefe de Relaciones Públicas de Shougang, Guillermo Alfaro, expresó que la empresa rechaza todas las declaraciones de Soto y precisó que este no es trabajador de la minera.
“Nunca lo he visto. Desconozco si cambió su versión pero la primera la rechazamos tajantemente”, acotó.
Al hacerle notar que Rubén Soto pudo haber sido contratado por la empresa tercerizadora Solmar, que brinda servicio de seguridad a Shougang, el funcionario minero dijo que no podía afirmar eso.
“Solmar no puede contratar gente para que nos haga daño”, dedujo.
En cuanto a la tardía intervención policial, explicó que el enfrentamiento con la población fue cerca de la comisaría y que ahí se atrincheraron para evitar que sea tomada. “De eso  se aprovechó la turba”, indicó.
Ninguna empresa asume pasivos ajenos
El problema laboral de los trabajadores de Coopsol surge cuando Shougang le rescinde el contrato a esta empresa tercerizadora y la reemplaza con otra, Adecco. Los trabajadores que se quedaron sin trabajo son invitados a contratar con la nueva tercerizadora, pero ellos, por tener más de cuatro años de servicio,  exigen ser pasados a planilla de Shougang. Esto no es aceptado por la minera china.
 “Cuando se inicia la huelga  contra Coopsol y esta deja de atender los servicios en las casas de los trabajadores, contratamos a Adecco, que es la que podría tomar los servicios de los trabajadores de Coopsol. Legalmente no es posible que pasen a Shougang. Pero luego le piden a Adecco que les reconozcan sus tiempos de servicio. Ese es el problema que ha surgido. Ninguna empresa va a asumir un pasivo de esta naturaleza”, señaló el jefe de Asesoría Jurídica de Shougang, Julio Seminario.
CLAVES
El martes 9, el dirigente Álvaro Loaces, dialogará con Adecco en Lima.
“Adecco hace contratos pero sin derechos adquiridos, solo pide que renuncien a Coopsol. Dice que si no cobran el cheque, irá al banco y lo sacarán con abogado”, dijo María Medrano, esposa de un trabajador en huelga.
La República