Foto: ProActivo.

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ProActivo

Por Mónica Belling.

El gerente general del proyecto Marcobre, Steven Botts, analizó la situación que atraviesa la minería peruana y resaltó que si bien en los últimos años se tuvo los retos sociales y medioambientales, ahora se suma el reto de bajar los costos por el ciclo de los bajos precios de los metales. En el marco del inicio de la maestría de Gestión Minera de Gerens, Botts llamó a la reflexión a los asistentes, sobre lo fácil que puede ser reclamar sobre el contexto actual, pero lo que realmente diferenciará a los profesionales es la habilidad de proponer soluciones.

Al analizar el desarrollo de las compañías, dijo que aquellas que sobrevivan al actual ciclo “tendrán grandes oportunidades en el futuro”. El empresario recomendó ver siempre los problemas del sector como oportunidades y enseñar a la población sobre los beneficios de los proyectos mineros. En esa línea, sostuvo que preocupa la falta de confianza. “Es impresionante y tiene gran costo para el país”, lamentó.

“Mi mensaje es no olvidar ver las buenas relaciones y promover la confianza entre ustedes y quienes viven alrededor de la mina, así como con autoridades del Estado”. Respecto a la gestión del agua, consideró clave el monitoreo participativo para generar confianza, “mi experiencia en Huarmey (Antamina), demuestra que puedes trabajar en el proceso de monitoreo y análisis del agua con la gente que vive cerca de los proyectos, siendo transparente con los resultados día a día”.

Perú sigue muy atractivo

Por otro lado, recordó que las minas son difíciles de ¡mplementar ambientalmente, socialmente y políticamente. “Es un negocio muy riesgoso, si no fuera así todo el mundo estaría involucrado. Creo que los precios de los metales subirán en el largo plazo por una razón muy simple; hay más gente en el mundo cada día, y más gente usa más metal”, anotó.

Sobre el futuro de la minería en Perú, anotó que si bien existe yacimientos con mejores leyes en otros países, esos sitios son muy peligrosos y políticamente inestables, por eso consideró que Perú sigue siendo muy atractivo para las inversiones.