Foto: La República
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Un dramático testimonio reveló Alan Flores Paico, el minero que se salvó de morir sepultado por el alud un huaico que ingresó a la mina arequipeña en Caravelí, el pasado 16 de enero. Sus palabras al diario Correo, grafican lo lejos que están del sector de los mineros informales y la falta de básicos protocolos de seguridad en la precaria mina.
“Yo estaba en la mina cuando todo ocurrió. Recuerdo que era las 15:40 horas y solo vi polvo y sonó como si algo reventara, pensé que era una manguera de aire de la perforadora. Yo estaba a 80 metros de profundidad donde se ubica el primer nivel, y cuando salí a la galería el agua me llegaba a las rodillas, miré el segundo nivel y tercer nivel estaba totalmente inundados, atiné a salir porque el ingreso a la mina estaba seco, pues el huaico ingreso por la chimenea”, narró Alan Flores Paico, el sobreviviente a o que ingresó a la mina Las Gemelas, Caravelí, el pasado 16 de enero.
El dolor de Alan, quien llevaba ocho años trabajando en la labor minera, se acrecienta porque en el accidente su hermano menor, Yeltsin Flores de apenas 22 años, perdió la vida al quedar atrapado bajo el lodo y tierra, luego de entrar a trabajar hace siete meses apenas tras dejar su lugar de origen, Barranca, Lima.
Los detalles que da al diario en mención refierene que la es mina administrada por la empresa Chinchilico de Miguel Aybar; y el dueño es Gerson Quintanilla. Era la primera que ocrria un hecho de ese tipo, no sabían cómo actuar.
Siguen en la búsqueda para recuperar los cuerpos
Unos 40 mineros le brindaron apoyo y la minera Laytaruma, también expresó solidaridad. “Lo único que pedimos es que se trabaje hasta encontrar los cuerpos de nuestros familiares en el estado en que estén, si están vivos o no sé, pedimos que no se pare la búsqueda y que se llegue hasta el final”, señaló Alan Flores.
Alan Flores y los familiares de las víctimas siguen en la búsqueda de los cuerpos sin vida de sus familiares para poder enterrarlos. La tragedia continúa para ellos.