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Para algunos empleados, trabajar para tener un aumento o una posición de liderazgo es una transición natural en sus carreras. Pero otras personas no están tan interesadas en ser líderes corporativos. De cualquier forma, los jefes deberían apoyarlos y darles incentivos, a pesar de sus metas profesionales.

El involucramiento de los trabajadores es esencial en todos los niveles de la organización. Aquí hay algunas ideas para gestionar a aquellos que no aspiran a ser líderes pero que les importa involucrarse en todo lo que tenga que ver con la empresa:

Dales opciones de desarrollo profesional. Cuando se les ofrece este tipo de oportunidades, los empleados se comprometen más con tu negocio. Los dirigentes pueden hacer ciertas cosas para desarrollar las habilidades de las personas que trabajan con ellos. Pueden pagarles membresías en una organización profesional, ser anfitriones de talleres de desarrollo o mandarlos a conferencias.

Dales la opción de cambiar de departamento. Recomiendo que si un empleado desea tener más experiencia aunque no sea en un rol de líder, muévelo a otro departamento donde sus habilidades y experiencia se usen de otra forma.

Dales entrenamiento continuo. De acuerdo a una encuesta, más de la mitad de los empleados no buscan una posición de liderazgo porque están felices con sus roles actuales. El entrenamiento continuo ayudará a que esos trabajadores aprendan cómo ser más productivos. A un reclutador de recursos humanos tal vez le guste su trabajo pero quiera mejorar sus habilidades. Dale un curso de lo último en tecnología para que reclute a los mejores candidatos.

Ayúdalos a mejorar su educación. Casi el 20 por ciento de los empleados dicen que evitan las posiciones de liderazgo porque piensan que no tienen los conocimientos necesarios. Los jefes deberían ayudar a las personas que deseen continuar su educación, aunque no todos pueden pagar esto, sí pueden facilitar el camino.

Ofrece beneficios competitivos y bonos. Aunque los empleados decidan que no quieren un aumento, esto no quiere decir necesariamente que dejarán de dar su máximo esfuerzo en el trabajo. Recompensa a la gente dedicada y productiva ofreciéndoles bonos mensuales, reconocimientos o más tiempo de vacaciones. Esto los hará sentir que su trabajo y dedicación es valorado.