Volcán UbinasDurante el proceso eruptivo 2013-2014, el volcán Ubinas ha emitido un volumen de 15 millones de metros cúbicos de ceniza acumulada, lo que permite estimar un valor de Índice moderado de explosividad volcánica (IEV), precisó el Comité Científico de Monitoreo Permanente de dicho macizo.

Las emisiones de ceniza seguirán siendo persistentes y se podrían generar explosiones esporádicas de baja a moderada magnitudindica el octavo comunicado oficial de dicho grupo de trabajo integrado por el Instituto Geofísico del Perú (IGP) y el Instituto Geológico Minero y Metalúrgico (Ingemmet), difundido ayer.

“Las cenizas generan efectos negativos en la salud de las personas, así como afectan la actividad agrícola y ganadera”, reitera el documento. Por ello, aconseja evaluar de forma permanente el impacto de las caídas de ceniza, así como implementar acciones de mitigación efectivas.

Entre el 5 de junio y 23 de julio del 2014, la dirección de dispersión de ceniza predominante ha sido hacia el sureste, este, noreste y noroeste, afectando principalmente las localidades de Querapi, Ubinas, Tonohaya, Sacohaya, Escacha y algunos anexos de San Juan de Tarucani (Arequipa), sobre todo durante la explosión del 17 de julio a las 08:14 horas, la cual generó una columna de gases y ceniza de 5000 metros de  altura por encima del volcán.

Con los trabajos de campo realizados en junio se determinó que la mayor cantidad de ceniza emitida por el Ubinas, durante todo el proceso eruptivo 2013-2014, se disipó principalmente en el sector noreste, noroeste, este y sureste del volcán.

Es así que se han registrado espesores de 1 milímetro de ceniza en los poblados de Yalahua, Lucco y Lloque (localizados entre 16 y 18 kilómetros al noreste del Ubinas), y en San Juan de Tarucani (al noroeste del Ubinas).

Asimismo, se han registrado espesores de ceniza entre 6 y 1 milímetros  en el valle de Ubinas. También se han encontrado fragmentos de roca de hasta 1 centímetro de diámetro a 5 kilómetros al este del volcán. Estos últimos habrían sido emitidos durante las explosiones ocurridas en mayo y junio de 2014.

El comunicado conjunto subraya que el proceso eruptivo del Ubinas en las últimas semanas se ha caracterizado por presentar leves emisiones de ceniza, gases volcánicos (principalmente vapor de agua), interrumpidos por esporádicas explosiones leves a moderadas, luego de las cuales se registraron variables caídas de ceniza en las proximidades.

Alerta Naranja

Ante este panorama, el Comité Científico recomendó continuar con el nivel de “Alerta Volcánica Naranja” y mantener la evacuación de los pobladores de Querapi y Tonohaya, porque se prevé que la actividad eruptiva continúe en niveles similares a los registrados estos últimos días.

De acuerdo al estudio realizado del 5 de junio al 23 de julio, ratifica que la actividad sísmica en general ha disminuido, es así que su nivel de energía ha descendido a la mitad del periodo abril-mayo, pues de 1000 MJ/día pasó a 500 MJ/día, en promedio. En este periodo, los días de mayor actividad ocurrieron los días 11 y 21 de junio.

El número de explosiones ha disminuido paulatinamente, pues mientras en junio ocurría en promedio una explosión cada 2 días, en julio ocurrió uno cada 3 días. Por otro lado, la energía de explosiones registró valores entre 2 MJ y 880 MJ.

En este periodo se registraron 22 explosiones, sin embargo, sus energías han sido mucho menores a las observadas en abril de este año. Solo ocurrió una explosión (día 30 de junio, 08:58 Hora Local) de 222 MJ que provocó emisión de fragmentos de lava incandescente que cayeron en el sector del flanco noroeste, a 1.5 kilómetros del  cráter.

El número de sismos tipo híbrido se mantuvo bajo, a excepción de los días 28, 29 y 30 de junio, en que se produjeron un enjambre de más de 1,000 sismos de este tipo, puntualiza el documento.

En tanto, la  actividad sísmica tipo tremor de baja energía ha persistido en este periodo, pero sigue con tendencia a la baja; estos tremores estuvieron asociados a una persistente emisión de ceniza, vapor de agua y gases magmáticos.

El monitoreo de deformación del edificio volcánico, realizado en julio, reporta que no se ha producido deformación en el volcán Ubinas.

Dentro de otras recomendaciones de los especialista del IGP e Ingemmet , figura mejorar las acciones de preparación y respuesta frente al actual proceso eruptivo, ya que la mayoría de pueblos del valle de Ubinas carecen de planes de evacuación y contingencia actualizados.

Aconsejan rehabilitar el refugio de Chacchagén, implementado en una zona segura y bajo criterios técnicos durante el 2006 y que actualmente posee luz, base de concreto, agua, entre otros avances, para que esté disponible de forma permanente y sea de uso temporal.

Del mismo modo, evaluar la implementación de nuevos refugiospero en zonas de bajo peligro volcánico y a más de 10 kilómetros de distancia del volcánconstruir una ruta de escape para el pueblo de Escacha hacia el refugio de Chacchagén, en dirección sur, por la margen izquierda de los ríos Para y Ubinas; y socializar y ejecutar los planes de contingencia.

Andina