El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), proyectó que la inversión privada en el país crecerá 4.8% en 2020, explicada por la mayor inversión de los grandes proyectos mineros que iniciaron construcción en 2018 y la reactivación de la inversión no minera, como infraestructura, hidrocarburos, retail, inmobiliario, entre otros.
Así lo señala en el Marco Macroeconómico Multianual 2020-2023 aprobado en la sesión del Consejo de Ministros el último 21 de agosto.
Refirió que la inversión privada registró un moderado crecimiento en el primer semestre del 2019 (alrededor de 3.9%); y esta, acelerará su ritmo de crecimiento en el segundo semestre del presente año.
“La inversión privada estará favorecida por la expansión a tasas de dos dígitos de la inversión minera, debido a la continuidad de grandes proyectos mineros que iniciaron construcción en 2018 como Quellaveco y Mina Justa”, explicó.
Asimismo, indicó que la inversión minera seguirá creciendo en 2019, impulsada por la ejecución de grandes proyectos, los cuales vienen realizando licitaciones de obras de importancia.
“Por ejemplo, el proyecto Quellaveco ha licitado la construcción de sus presas en mayo 2019, y el edificio e instalaciones del chancador primario y la presa de relaves en junio 2019”, indicó.
“Con ello, Quellaveco estaría desembolsando alrededor de 900 millones de dólares en Capex (inversión productiva) en el segundo semestre del 2019. En el caso del proyecto Mina Justa, se ha adjudicado la construcción de su planta de concentrados de Sulfuros en abril 2019”, agregó.
También indicó que el proyecto Ampliación de Santa María (110 millones de dólares) concluyó su primera fase en mayo 2019 y avanzaría con su segunda etapa de construcción en lo que resta del año, según el Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Para 2020, además de estos grandes proyectos, se tiene previsto el inicio de la construcción de nuevos proyectos mineros como Corani (585 millones de dólares), que empezaría en el segundo semestre del 2020 a realizar obras básicas como el marcado de terrenos, puntos de perforación e inicio de obras de acceso (antes programadas para tercer trimestre del 2019).
También, Pampa de Pongo (2,200 millones de dólares), que ya cuenta con todos los permisos ambientales y viene trabajando la adquisición de su financiamiento; y Yanacocha Sulfuros (2,100 millones de dólares), que obtuvo la aprobación de su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) en junio 2019 y ahora se encuentra en etapa de factibilidad.
Mejora de la regulación
De manera complementaria, el MEF indicó que el Gobierno trabaja de forma constante en la mejora del marco regulatorio para promover la competitividad del sector minero energético.
“En efecto, se ratificaron 119 procedimientos administrativos del Ministerio de Energía y Minas durante el primer semestre 2019, luego de que estos cumplieran con los principios de legalidad, necesidad, efectividad y proporcionalidad que componen el análisis de calidad regulatoria”, indicó.
Detalló que entre los procedimientos que corroboraron su idoneidad, como parte de la mejora de la calidad regulatoria, se encuentran: i) los referidos a autorizaciones de instalación y operación de ductos; ii) el establecimiento de servidumbres; iii) la evaluación de planes de cierre de minas y de pasivos ambientales; iv) las concesiones de generación, transmisión y distribución de electricidad; y v) los procedimientos referidos al Registro Integral de Formalización Minera.
Asimismo, en junio de 2019, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) dispuso la constitución de fideicomisos como mecanismo para las garantías del cierre de minas por el 100% de los bienes inmuebles (antes 50%), la cual ayudará a los titulares mineros con las dificultades que enfrentaban en el procedimiento concursal y simplificará el proceso de conversión de las garantías a dinero.
“Adicionalmente, el Minem viene fomentando el proceso de promoción de la formalización minera, y por ello se ha transferido recursos a los gobiernos regionales45 para capacitar a las empresas mineras en la elaboración del Instrumento de Gestión Ambiental para la Formalización (IGAFOM), como requisito indispensable para dinamizar el proceso de formalización”, puntualizó.
Fuente: Andina