La minería juega un rol importante en la economía del país al proveer recursos para el desarrollo, y no obstante el proyecto Tía María aún no tiene el contexto social adecuado, el interés de los inversores por el Perú continúa, destaca el titular del Minem.
¿A qué se refiere la autorización otorgada por el Consejo de Minería al proyecto Tía María?
–El Consejo Nacional de Minería ha ratificado la autorización que la Dirección General de Minería dio exclusivamente a la etapa B de la planta de beneficio, esto es, donde se separa el mineral útil del que no lo es.
¿A qué distancia se encuentra esta planta de la población?
–A 10 kilómetros, aproximadamente, del Valle de Tambo.
¿Cuántas hectáreas comprende la planta de beneficio?
–Son 200 hectáreas sobre un área de 5,000 hectáreas que comprende el proyecto.
¿Estamos hablando solo del 4% del área total del proyecto?
–Sí y donde la autorización solamente involucraba aspectos técnicos mineros, dado que todas las consideraciones ambientales ya venían amparadas por el Estudio de Impacto Ambiental que es la certificación ambiental, que le permite solicitar las diversas autorizaciones y permisos que requiere el proyecto.
¿Ratifica que Tía María no va a avanzar si no se logra un clima de paz social?
–En definitiva, y la empresa lo sabe y por eso es su compromiso en una carta, y ahora está dentro del expediente.
¿Considera que la agricultura y la minería pueden convivir?
–Así es, los avances tecnológicos permiten que el desarrollo de la minería conviva con la agricultura, ganadería y otras actividades económicas. Por lo tanto, nosotros requerimos empresas modernas que traigan esta tecnología al país.
¿Cuál es la proyección de inversiones en el sector minero?
–Este año pensamos llegar a los 6,000 millones de dólares de inversión, a setiembre ya estamos en 4,070 millones de dólares, ya nos aproximamos al 70% de la meta y por lo tanto pensamos que la podemos alcanzar. En los siguientes tres años, el sector tiene como meta alcanzar más de 20,000 millones de dólares de inversión. En este cálculo no está considerado Tía María.
¿Qué otros proyectos mineros están en camino este año?
–Están Quellaveco, Mina Justa y Toromocho.
¿Hay otros que vienen a continuación?
– Los proyectos más grandes que están comprendidos en los 20,000 millones son Pampa del Pongo, Sulfuros Yanacocha, Zafranal.
¿Cómo observa el interés de los inversores mineros por el Perú a pesar del caso Tía María?
-He tenido reuniones con diversos inversionistas que han mostrado su interés de proseguir con sus actividades en el Perú, entre ellos, empresas grandes como Río Tinto, que descubrió Tía María y lo dejó porque era un proyecto pequeño para ellos, esa empresa en otras partes del país desarrolla proyectos y está pidiendo traer otros socios para participar.
¿Cuál es el potencial de nuestras reservas mineras?
-Si todas las reservas de minerales que actualmente están identificadas las valorizamos a precios actuales, significan seis veces el PBI nacional (222 mil millones de dólares en el2018, según el Banco Mundial). Es una valorización grosso modo y, de ese monto, el 60% es cobre y del total de los minerales el 60% está en el sur del país.
¿El Perú se puede considerar afortunado con la minería?
-Claro, porque nos proporciona el 60% de las divisas, y ese posicionamiento influye mucho en el tipo de cambio.
¿A pesar de que ha bajado el precio del cobre, continúa siendo atractiva la inversión minera en el Perú?
Una de las ventajas es el bajo costo de energía, las altas tasas de ley en los minerales y somos polimetálicos a diferencia de otros países que son monoproductores.
Perú tiene moderna normativa ambiental
El ministro Liu Yonsen destacó que el Perú cuenta con una normativa ambiental moderna y más exigente que en décadas pasadas, y también la tecnología que emplean las empresas mineras tiene menor impacto en el entorno.
“A las minas que son autorizadas actualmente se les pide que traigan tecnología moderna para no generar los impactos que en el pasado distanciaron a la actividad minera respecto de la sociedad”, afirmó.
Asimismo, refirió que los mercados internacionales “castigan” los precios de los minerales que hayan sido extraídos con subestándares ambientales.
“Estos son temas que también de alguna manera las empresas cautelan que sus Estudios de Impacto Ambiental (EIA) cumplan altos estándares porque así también lo exigen los financistas y una vez que llegan al mercado tienen que demostrar que no se ha efectuado un gran impacto ambiental”
También señaló que la relación entre las empresas mineras y su entorno ha evolucionado.
“Podríamos decir que hay proyectos donde los conflictos y las diferencias son mínimas, podría mencionar 10 casos, comenzando desde Antamina, en Caral, la mina Colquisiri se desarrolla muy bien al lado del valle y no hay ningún problema”, puntualizó.
Fuente: El Peruano