Volcan

(Foto: Volcan)

ProActivo | La clasificadora de riesgo Pacific Credit Rating ratifica las clasificaciones vigentes de Volcan Compañía Minera S.A.A. de “PEPCN2” a las acciones comunes Serie A y serie B y de “PE1” al Primer Programa de Instrumentos de Corto Plazo, con perspectiva Estable.

Esta decisión se sustenta en la amplia trayectoria y posicionamiento que mantiene el grupo en el mercado como uno de los principales productores mineros a nivel global y nacional, la diversificación equilibrada en sus unidades mineras, la vida útil de mina en etapa final con alto potencial a extenderse tras la identificación de nuevo cuerpos con recursos confirmados, el enfoque mostrado en la reducción de costos operativos, como factor determinante de la viabilidad económica de la Compañía en el largo plazo.

Por otro lado, la calificación se encuentra limitada por la exposición de la Compañía al contexto internacional, bajo niveles de cobertura de servicio de deuda, menores márgenes de rentabilidad, liquidez ajustada y apalancamiento moderado. Asimismo, se considera el soporte de la multinacional Glencore, con una visión enfocada en inversiones y crecimiento de las operaciones en el mediano plazo.

Perspectiva:

Estable.

Resumen Ejecutivo

• Amplia trayectoria y posicionamiento en el mercado. Volcan Compañía Minera es una empresa consolidada, con un grupo de empresas bajo su poder, que opera en la zona central del Perú desde 1943. A la fecha se mantiene como un importante productor global y nacional de zinc, plata y plomo. De acuerdo con el ranking nacional, se ubicó dentro del top 5 en la producción de zinc, plomo y plata.

• Mayor potencial de la vida útil de mina. La vida de mina actual con reservas es de 8 años, la cual está llegando a su etapa final; sin embargo, considerando recursos inferidos en operaciones actuales, la vida de mina va hasta los 15 años, asegurando el nivel operativo en el mediano y largo plazo, que incluso podría ser mayor dada las inversiones agresivas en exploración y confirmación de minerales en proyectos como Romina, Carhuacayán y nuevos cuerpos identificados.

• Reducción histórica en costos operativos. Durante el periodo de análisis, se ha observado un continuo enfoque de la Compañía en el control de sus costos operativos, reflejado en el costo unitario, el cual al 3T-19 fue 45.2 US$/TM, – 30.2% respecto al 3T-14 (63.5 US$/TM) gracias a medidas como la optimización en los métodos de minado y uso de materiales, reestructuración en la gestión de contratistas, mayor eficiencia en el uso de energía, entre otras. Volcan espera en el corto plazo mantener su costo unitario en 45.0 US$/TM.

• Moderada diversificación operativa. La Compañía opera a través de 10 minas (incluyendo la Planta de Óxidos), distribuidas en 5 unidades mineras, con una participación equilibrada, donde la principal unidad (UM Yauli) representa el 36.7% del total de mineral tratado. Ello le permite hacer frente a paralizaciones en la producción provocadas por conflictos sociales.

• Exposición a la fluctuación internacional del precio de los metales y moderado nivel de sensibilidad de las acciones. Al corte de evaluación, la Compañía mantiene derivados implícitos, donde el valor de la venta está sujeto a posibles ajustes por variaciones en el precio de mercado de los metales. Sin embargo, a partir de noviembre, Volcan ha coberturado el precio de su principal metal (zinc) para una parte de su producción. Por otro lado, las acciones tipo A y B, especialmente las de tipo B, se muestran sensibles a los movimientos de los precios de los metales. A sep-19, las acciones A y B experimentaron variaciones de -7.0% y -45.3%, respectivamente, frente a reducciones de -13.5%, – 16.3% y -3.1% en los precios5 del Zinc, Plomo y Plata, respectivamente.

• Bajo nivel de RCSD6 y apalancamiento moderado. Desde el 2T-19, la capacidad del EBITDA anualizado de la Compañía para afrontar el pago de sus gastos financieros ha mostrado reducciones significativas con respecto a similares periodos del año previo, llegando a niveles de 2.8x (sep-18: 5.1x) producto de la contracción de sus ingresos operativos por la tendencia internacional de los precios y la baja producción. Por otro lado, la empresa mantiene un nivel de apalancamiento moderado de 2.4x, lo que significa que los activos aún se encuentran financiados considerablemente por terceros (pasivo), exponiéndose a mayores costos fijos financieros que contribuirían a generar mayor sensibilidad de sus flujos frente a situaciones adversas.

• Deterioro de Indicadores de rentabilidad. La caída promedio de los precios de los metales (-6.9%), la contracción en la producción de finos (-2.7%) y por ende la reducción interanual en el valor de las ventas netas (-10.9%), aunado a mayores costos por depreciación (+40.4%) por la NIFF16, así como mayores gastos incurridos por exploraciones (+74.8%), llevaron a un margen bruto anualizado de 17.3% (sep-18: 34.7%) y un margen operativo de 7.6% (sep-18: 69.1%), que frente a mayores gastos financieros (+21.8%), situaron al margen neto en -4.1% (sep-18: 68.3%). De este modo, el ROA y ROE 12M fueron negativos, ubicándose en -1.3% y -4.5%, cada uno (sep-18: 23.9% y 74.5%).

• Bajos niveles de liquidez. Los ratios de liquidez se encuentran por debajo de 1 desde dic-17. Al corte de evaluación, el ratio corriente fue 0.5x y la prueba ácida, 0.4x. Por ende, la Compañía opera con capital de trabajo negativo desde entonces. Se espera que estos niveles mejoren en la medida que la empresa reduzca su deuda financiera de corto plazo con la venta de las unidades Cerro de Pasco y Óxidos, los cuales no suponen un perjuicio al EBITDA dado los términos que se indican en la compraventa, entre Volcan y Cerro de Pasco Resources Inc.

• Soporte económico. Desde inicios de 2018, la administración de Volcan y sus subsidiarias están bajo el control del importante grupo suizo Glencore International AG, dedicado a la extracción de minerales polimetálicos, quien ha desarrollado un planeamiento para la Compañía basado en desarrollar el potencial de las operaciones, invirtiendo agresivamente en exploraciones, lo que les permitirá incrementar el nivel de reservas y construir planes de minado de largo plazo. Asimismo, el Planeamiento Estratégico apunta a seguir reduciendo costos fijos operativos y administrativos, optimizar la estructura de deuda de la Compañía, e identificar posibilidades de sinergias.