Marita Chappuis

Por: Marita Chappuis 

Con una producción en todos los sectores que no remonta y la pandemia que no se rinde, le toca a la minería, una vez más, levantar la economía alicaída del país.

La tarea que tiene ahora la minería es “voltear el partido” en términos futbolísticos. Con una producción en todos los sectores que no remonta y la pandemia que no se rinde, le toca a la minería, una vez más, levantar la economía alicaída del país.

En este blog hemos comentado como después de la guerra con Chile, se dieron medidas promocionales para incentivar la exploración minera. También durante el segundo gobierno del Presidente Belaúnde, abuelo del actual ministro; su ministro PPK se “tiró con todo”, para construir Tintaya, abriendo un nuevo frente minero, el Metalotecto Ferrobamba, que desde Cusco hasta Apurímac alberga varias minas que no cesan de producir y llevar desarrollo. Tintaya es ahora Antapaccay. Sus vecinas son Las Bambas y Constancia. Están esperando Coroccohuayco, Los Quechuas, Haquira, Los Chancas, y otros más. El gobierno de Belaunde II no tenía fondos, sólo varias cajas llenas de estudios, y los papeles de la concesión. En Tintaya no había ni energía ni carreteras. Pero PPK hábilmente convenció a un sindicato de 15 bancos y al EDC canadiense, para que presten y se construya “llave en mano”. Punto aparte, habilidad que ciertos fiscales no entienden y menos reconocen.

En los 90´s, Fernando Sanchez Albavera, “volteó el partido”, cambiando la ley minera sumamente estatista, e iniciando el proceso de privatización. Cerro Verde, tenía un valor negativo. A la subasta se presentó un solo postor. Actualmente es clave para el desarrollo de Arequipa, y una de las minas más grandes del mundo, junto con Las Bambas, y Antamina.

En el 2000, le tocó a Jaime Quijandría “tirarse con todo” esta vez por Camisea. Tenía hasta a los industriales en contra, que temían el uso del gas. Todo Pisco hacía huelgas y marchas. Los análisis indican ahora, que la energía barata que trajo el gas de Camisea, permitió al Perú crecer como lo hizo en los últimos años.

Estos son algunos ejemplos de cómo cuando el MEM “enciende motores” mete “goles desde media cancha”. Victor Gobitz ha declarado muy apropiadamente que Tía María es tirar un penal sin arquero. Ricardo Labo, nos ha mostrado minuciosamente cuáles son los proyectos con estudios concluidos y listos para un “empujoncito” y aceleren su construcción.

El Presidente Vizcarra, cuando era embajador en Canadá, declaraba continuamente que él sacó Quellaveco, cuando Conga se detenía. Él es el llamado para ayudar a voltear el partido que estamos perdiendo por goleada. Sí se puede.