El grupo de los Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), después de una década de un alto desarrollo, parece que se enfrenta a unos años cuyo crecimiento se rebajará hasta el 3,2%, según la aseguradora de crédito Coface.
Y mientras los Brics ven cómo su ritmo de crecimiento disminuye, hay otras diez países dispuestos a ocupar su lugar gracias a un desarrollo sostenido de sus economías y a un entorno empresarial estable.
Aquí analizamos las fortalezas y debilidades de las diez economías que, según Forbes, están a la caza de los Brics:
Colombia
Las ventajas que pueden favorecer su desarrollo son su situación geográfica, una población de más de 50 millones de habitantes y unos abundantes recursos naturales. A esto, hay que añadir su potencial turístico, la estabilidad institucional y su sólido sistema bancario.
Pero no todo son ventajas. Entre sus debilidades, Forbes destaca su dependencia de los precios de las materias primas, unas infraestructuras que pueden ser insuficientes y los defectos en su sistema educativo, que se refleja en una baja productividad, unos altos índices de corrupción y una alta tasa de desempleo.
Indonesia
Sus principales fortalezas son la diversidad de sus recursos naturales, el dinamismo de su sector turístico y de su mercado interno, y la solidez de su sector bancario.
Los problemas para su desarrollo pueden ser la baja tasa de inversión, la falta de infraestructuras y la corrupción, que es una de las causas del desempleo y la pobreza que hay en el país.
Perú
Las fortalezas que destaca Forbes de Perú son su potencial de crecimiento, su pertenencia a la Alianza del Pacífico y sus recursos naturales. Además, tiene un nivel bajo de deuda pública y una alta dependencia del Banco Central. Su posición como destino turístico es otra ventaja indispensable.
Pero se trata de un país que también tiene sus debilidades. Entre ellas destacan su dependencia de las materias primas y la demanda china de las mismas, la desigualdad entre diferentes regiones del país o unas infraestructuras en salud, educación y de carreteras poco sólidas.
Filipinas
Su industria de la electrónica representa el 40% de sus exportaciones, lo que Forbes considera una ventaja pero podría convertirse en debilidad por la gran dependencia de su economía de este sector. Su crecimiento está basándose en sus exportaciones a los emergentes asiáticos, lo que no puede ser mala noticia.
Entre sus debilidades destacan un bajo nivel de inversión y unas deficiencias en su gobierno que se traducen en desigualdad social y bajo rendimiento económico.
Sri Lanka
La disminución de la pobreza en este país se está basando en unos muy positivos indicadores de desarrollo humano y gobernabilidad tras el fin de la guerra civil. Este hecho ha provocado también un aumento del turismo, que junto a la diversificación de su producción agrícola conforma su principal fortaleza.
El principal problema para su desarrollo es el exceso de deuda pública y su dependencia de la financiación exterior. Además, sus infraestructuras son débiles por la falta de inversión pública.
Kenia
Su estratégica situación geográfica conforma una ventaja fundamental respecto a otras economías. La diversidad en su agricultura, sus estables servicios financieros y la adopción de una nueva Constitución sitúan a Kenia como líder del mercado común de África Oriental.
La corrupción es su principal problema, además de una dependencia excesiva de su agricultura y unas infraestructuras insuficientes.
Tanzania
Tiene unos recursos naturales de oro y gas que sustentan su economía junto al uranio, carbón, hierro y petróleo. Además posee un sector turístico de lujo y una estabilidad política que favorecen el apoyo de otras naciones.
Sus debilidades principales son las deficiencias en infraestructuras, la baja productividad de su agricultura y la pobreza de una buena parte de su población. Además, sufre una excesiva dependencia de los precios de los minerales.
Zambia
Es el principal extractor de oro, uranio, cobalto y diamantes de África, además de disfrutar de un estable sistema democrático y de un sector turístico en auge.
Las principales debilidades son las enormes desigualdades económicas existentes, los deficientes sistemas públicos de salud y educación y el aislamiento de sus países vecinos. Además, depende en exceso del cobre y de la colaboración exterior.
Bangladesh
Los bajos costos de la mano de obra en el país lo convierten en uno de los grandes centros de producción textil. Además tiene una ayuda internacional importante en cuanto a financiación y un dato que favorece su potencial económico: el 45% de sus habitantes es menor de 15 años.
Su vulnerabilidad frente a cambios en el sector textil internacional es su principal deficiencia. Los bajísimos ingresos per cápita hacen que la tensión social y política sea constante, y además, los desastres naturales causan a menudo importantes daños.
Etiopía
Fortalezas: su economía está experimentando un proceso de diversificación muy favorecedor. La inversión en infraestructuras le hace destacar frente a otros países, además de tener un alto potencial hidroeléctrico.
La volatilidad de los precios de las materias primas, de los que depende en exceso, es su principal problema. Los problemas sociales por sus deficiencias gubernamentales y el endeudamiento del estado son otro lastre importante para su desarrollo.
El Economista América