Doce días no fueron suficientes. La COP20 requirió dos días adicionales para aterrizar conferencias, fiestas y “sensibilización”. Aunque con miras a Francia, en Lima, ante la prensa mundial, se logró menos de lo esperado. Lo incuestionable es que, con sus méritos y pasivos, el encuentro dejó una serie de lecciones para los funcionarios de 196 países, que tienen una responsabilidad histórica ante el planeta. ProActivo ofrece un resumen de los logros y fracasos del mega evento.
Según el Ministro de Relaciones Exteriores, Gonzalo Gutierrez, es rescatable que los países asumieron la obligación que tienen de elaborar un convenio internacional legalmente vinculante que se aplique a todos. “Introducir ese concepto en una decisión es un avance notable”, señaló.
Las palabras del ministro refieren un reto cumplido. El propósito principal de esta COP era comprometer a los países participantes a someterse a los acuerdos de la esperada cita en Francia el 2015 y se logró.
Sin embargo, la meta de generar un borrador estratégico que sirva como puente para firmar un acuerdo que le dé un giro de 180 grados a la historia de las políticas de emisión de CO2 de la industria global no fue posible, pues el documento final “Llamado de Lima para la acción climática” fue tildado como incompleto por muchos críticos.
Los comentarios en torno al texto son variopintos. Hay quienes lo califican como un espejismo en el Sahara y preámbulo del fracaso parisino, mientras que otro sector lo ve con una suerte de mesura, cautela y cierto optimismo que en suma reconfortan al gobierno.
Medidas para este verano
El hecho de que los países tengan que presentar planes para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero para el 31 de marzo del 2015 es otro logro. También se estipuló la creación de un programa de pérdidas y daños con el fin de ayudar a poblaciones afectadas por el cambio climático, así como el diseño del ‘Lima Information Hub’, una megabase de datos que recoge resultados y planes de los países para mitigar la deforestación.
Además, el presidente Ollanta Humala resaltó que esta edición sirvió para recaudar 10,200 millones de dólares para el Fondo Verde de la ONU.
El comité organizador de la COP 20 reconoció que aún no hay un consenso en torno al grado de responsabilidad y las medidas que deberían asumir los países potencia, principalmente China y Estados Unidos, para remediar los daños causados por la letal emisión de CO2.
Basta recordar que Estados Unidos anunció tibiamente que recién en 2030 reducirá sus emisiones en un máximo de 30 por ciento -en tanto que el gobierno chino solo prometió a regañadientes que recién en el 2030 empezará a reducir sus gases. Sin embargo para los expertos ayuda que China ya planifica sus ciudades con criterios de protección medioambiental.
En ese contexto queda claro lo difícil que será evitar que la temperatura terrestre supere los dos grados.
Perú afectado
Este problema sin fin ya le pasa la factura a Perú, pues se proyecta que, de no aplicarse medidas, el país duplicaría su emisión contaminadora en el 2050, lo que incrementará los efectos devastadores para los ríos, nevados, biodiversidad y más. ¿Pastoruri pediría la eutanasia para no ver su desintegración?
Por si fuera poco, para el año 2100 la costa central del país perderá hasta el 40% de sus fuentes de agua.
Dicho esto, el gobierno perdió la oportunidad histórica de informar al mundo sobre la pérdida de la biodiversidad que sufre el país de manera gradual y grave, por causa del calentamiento global. Hecho que además de afectar a los peruanos le quita al globo un pequeño espacio que concentra la megadiversidad. •