Los mercados financieros de Perú se encaminaban a una jornada compleja el lunes luego de que el candidato de extrema izquierda Pedro Castillo, que pasaba casi desapercibido en los sondeos, tomó la delantera en la primera ronda de las elecciones presidenciales.
Con el 53.6% de las actas procesadas, la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) dijo que Castillo -un profesor de primaria y dirigente sindical de 51 años- obtenía el 16.33% de los votos en los comicios del domingo, seguido por el economista liberal Hernando de Soto con 13.46%, la derechista Keiko Fujimori con el 12.91% y el ultraconservador Rafael López Aliaga con el 12.86%.
No obstante, un conteo rápido de la encuestadora Ipsos Perú dijo que Castillo habría recogido hasta el 18.1% de los votos y colocó a Fujimori -hija del encarcelado exmandatario Alberto Fujimori- como rival del balotaje en el segundo lugar con un 14.5%, al 100% de actas de sufragios analizados.
Si bien son frecuentes las crisis políticas, Perú ha sido uno de los mercados más sólidos y confiables de América Latina en los últimos años, atrayendo dinero internacional a las mesas de operaciones mediante la moneda local, el sol, y bonos soberanos.
El mercado cambiario aún no abría en Lima, pero los bonos comenzaban a reaccionar. El referencial de la deuda peruana caía alrededor de 0.5 centavos de dólar y los diferenciales -la prima de riesgo frente a los bonos del Tesoro estadounidenses- se ampliaban a 10 puntos básicos, de acuerdo a operadores.
“No anticipábamos el escenario en que un candidato de extrema izquierda, que hace apenas una semana tenía un 5% de intención de voto, lograra adelantarse en la primera ronda”, dijeron analistas de JPMorgan en una nota enviada a clientes.
Castillo se beneficia del enojo público que ha convulsionado a los habitantes de Perú, luego de un año de pandemia de coronavirus y debacle económica.
“Yo diría que (el resultado electoral) es negativo en general para los bonos y que la volatilidad política se mantendrá en Perú”, dijo Natalie Marshik, directora para mercados emergentes en Stifel, quien destacó que el Congreso del país sudamericano también lucirá fragmentado tras las elecciones.
“El tramo final de la curva (del mercado de bonos) y la parte media ya han sufrido liquidaciones y yo esperaría más debilidad”, aunque uno de los puntos a favor es que Perú tiene una sólida hoja de balance, indicó.
Fuente: Reuters