Por: ANTHONY LAUB
Keiko propone repartir el 40% del canon minero a la población. Propuesta atrevida que se asemeja a lo promovido aquí (Propiedad Universal), cuando planteamos que parte de lo recaudado por la explotación de los recursos naturales vaya a un fondo individual e intangible de los ciudadanos y limitar lo que se lleva ese Estado incapaz que nos ha fallado.
Los que viven del Estado, están contra la propuesta pues ocurre, este tendrá que hacer lo que nunca ha hecho: optimizar el gasto público y limitar las prebendas que da a los que nada hacen por el bienestar del pueblo. El Estado es la única entidad que cuando la economía está mal, en vez de ajustarse y restringir gasto como todos, consume más recursos de la gente.
Esta medida pondrá dinero en el pueblo, que está en mejor posición que cualquier burócrata para decidir en qué lo invierte. La mayor valía es que se da medios para que la gente mejore su calidad de vida y sea más libre. Es una medida liberadora, que rompe con el clientelismo político practicado por personajes opacos como Castillo, Cerrón, Mendoza o Arana. Sería interesante que esta propuesta se amplíe a todos los recursos naturales para generar una bolsa mayor que beneficie a más personas y la complementaría con devolver un porcentaje del IGV, generando ahorros y colaborando con formalizar la economía.
La pandemia ha golpeado la salud y la economía. Al COVID lo venceremos con medicina y ciencia; a la pobreza, solo se le combate con mayores ingresos y esa es la fortaleza de la propuesta de Keiko. No al comunismo, no al Movadef.
Fuente: Perú 21