Tras cancelación de gasoducto, peruana busca liquidez para garantizar pago de sus obligaciones financieras.
La firma peruana Graña y Montero dijo el miércoles que evalúa vender activos por US$300 millones que le darían liquidez para garantizar el pago de sus obligaciones financieras, tras la cancelación de un millonario contrato de gasoducto.Graña y Montero, la mayor constructora del Perú, tenía el 20% de participación en el gasoducto controlado por la brasileña Odebrecht y que fue cancelado esta semana por el Gobierno porque no consiguió financiamiento.
La decisión de la compañía fue comunicada a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV). Según el documento, desde hace unos meses el holding trabaja un plan de desinversiones que será presentado en el próximo directorio del 26 de enero para su aprobación.
Las acciones de Graña y Montero subían más de un 2 por ciento en las bolsa de Lima y de Nueva York tras el anuncio.
Fuente: El Comercio