- Para una minería saludable y responsable es necesario un marco institucional y legal sostenible, estable y predecible, afirma Francisco Tong.
Para tener una industria minera saludable y responsable es importante la estabilidad jurídica en el sistema de concesiones mineras, sostuvo Francisco Tong, socio de Rodrigo, Elías & Medrano.
Tong comentó que, si bien el país tiene recursos minerales valiosos para el desarrollo de nuevas minas, se debe proteger la predictibilidad sobre las concesiones mineras.
“Nuestra competitividad ha disminuido. No basta con una buena geología, es necesario un marco institucional y legal sostenible, estable y predecible. Solo así tendremos una minería saludable y responsable” afirmó en una columna publicada en el diario Gestión.
Nuevos plazos y penalidades
El Perú se ha convertido en un destino de inversión minera porque cuenta con un sistema de concesiones mineras competitivo, con reglas claras y seguridad jurídica, sin embargo, en los últimos meses se ha cuestionado el marco regulatorio peruano.
Se trata de un proyecto de ley en el Congreso busca modificar algunos artículos de la Ley General de Minería para recortar el plazo de vigencia de esas concesiones cuando estas no inicien sus inversiones en determinados plazos y no se llegue a cumplir determinados montos de producción mínima anual, subrayó Tong.
La iniciativa legislativa propone incrementar el monto a pagar por el derecho de vigencia de las concesiones mineras.
Asimismo, recomienda aumentar las penalidades económicas por incumplimiento de la producción mínima anual efectiva a los 20 años desde su titulación (hoy es desde los 30 años).
Consecuencias
Para Tong las imputaciones contra el sistema como obstáculo para la formalización de los mineros artesanales carecen de fundamento y encubrirían un intento de incentivar la informalidad y la minería ilegal.
“Para impedir dicho acaparamiento y supuestamente para propiciar la formalización minera se han presentado proyectos legislativos que buscan reducir los plazos para que los titulares mineros desarrollen sus proyectos obligándolos a poner en producción rápidamente sus concesiones, como si fueran máquinas productoras de minerales. De no hacerlo podrían perder sus derechos”, refirió.
Tong recordó que la industria minera implica una inversión considerable y riesgos elevados, así como un proceso largo, donde además de la identificación de zonas mineralizadas, que incluye la exploración y evaluación geológica, se evalúa la factibilidad del proyecto, la ingeniería, seguridad y el impacto ambiental.
“Tras superar estas etapas, es necesario obtener la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental Detallado, asegurar el financiamiento, preparar la ingeniería detallada y finalmente, construir el proyecto. Todo esto demanda tiempo y un análisis riguroso con más de 200 aprobaciones y lidiar con más de 30 autoridades”, aseveró.
Reflexiones
El especialista en derecho minero aseveró que si se busca una minería sostenible y competitiva no se debe apresurar el proceso. Recordó que a nivel global los proyectos mineros medianos y grandes tardan entre 20 y 30 años en desarrollarse y algunos en Perú incluso más.
“Si bien se podría cuestionar los montos de las penalidades, lo indiscutible es que son un desincentivo necesario. Reducir los plazos de las concesiones afectaría la competitividad del país, pondría en riesgo derechos adquiridos y fomentaría la minería informal e ilegal, que opera sin permisos, planificación ni cuidado ambiental”, culminó.