
La Rama Estudiantil IEEE UNMSM, presidida por Rodrigo Espinoza, estudiante de la carrera de Ingeniería Electrónica, viene consolidándose como una de las comunidades universitarias más activas en el ámbito de la investigación, la innovación tecnológica y los proyectos con impacto humanitario.
La semana del 22 al 26 de septiembre se llevó a cabo el IEEE FISI WEEK 2025, en colaboración con la Facultad de Ingeniería de Sistemas e Informática, el Comité Especial de Ingeniería Biomédica del Capítulo de Ingeniería Electrónica del CIP, así como los capítulos IEEE AESS UNMSM, IEEE APS UNMSM, IEEE EMBS UNMSM, IEEE RAS UNMSM y el grupo de afinidad IEEE WIE UNMSM.
Con más de 300 colaboradores de distintas facultades, la rama reúne a jóvenes con interés en la ciencia aplicada, destacando por su participación en congresos internacionales y concursos que vinculan el conocimiento con el servicio a la sociedad. “Somos una comunidad fuerte, no muy grande, pero con presencia reconocida. En San Marcos contamos con miembros que han marcado huella en nuestra organización, como Nicole Caballero, Nataly Rojas, Rivaldo Durand y Romildo Silva, quienes han representado al país en diversos escenarios académicos; algunos de ellos ya culminaron su etapa en IEEE, mientras que otros mantienen hasta hoy un rol activo en la comunidad académica y profesional”, señaló Espinoza.
Debido al trabajo en conjunto de los capítulos técnicos y grupos de afinidad, la Rama Estudiantil IEEE ha sido reconocida durante tres años consecutivos a nivel internacional como “Rama ejemplar” por su desempeño académico y humanitario. Gracias a esto, en octubre, sus integrantes viajarán a Uruguay tras obtener una nominación en un evento de carácter humanitario, reafirmando la presencia de San Marcos en escenarios globales.
Primer torneo de robots en San Marcos
En el ámbito local, el capítulo IEEE RAS UNMSM organizará la primera edición del Torneo de Robótica “DECANATRON”, que se llevará a cabo en octubre. La competencia contará con distintas categorías: desde el robot velocista, que debe seguir una línea en el menor tiempo posible, hasta el robot soccer, en el que dos equipos de tres robots se enfrentan en un partido de fútbol tecnológico.
“El objetivo es mostrar que la robótica no es tan inaccesible como se cree. Queremos que los estudiantes pierdan el miedo, que comiencen con proyectos sencillos y poco a poco se enfrenten a desafíos más complejos. Así fortalecemos una comunidad sólida y entusiasta”, explica Espinoza.
Los interesados en participar podrán inscribirse en categorías individuales o en grupos, dependiendo de la competencia. El torneo busca convertirse en una tradición anual en San Marcos, abriendo un espacio de innovación y aprendizaje para los estudiantes de ingeniería y carreras afines.
Para Espinoza, este tipo de iniciativas complementa la formación que se recibe en las aulas. “Muchas veces la universidad no puede profundizar en herramientas y entornos de aplicación práctica que hoy son ampliamente usados en la industria. Estos eventos nos permiten acercarnos a esas tecnologías, aprender lo que no siempre se enseña en clase y, al mismo tiempo, generar vínculos con empresas y congresos internacionales”, puntualizó.
