Marco Morales, Pacasmayo

Por: Marco Morales, gerente de Seguridad, Salud Ocupacional, Medio Ambiente y Sistemas de Gestión de Pacasmayo 

Las personas son el activo más valioso en el desarrollo de cualquier actividad productiva, incluida la construcción. En ese sentido, la seguridad y la salud no son un requisito más: son la base sobre la que se sostiene cada proyecto, cada obra y cada sueño. Para las compañías que tenemos a la sostenibilidad como eje transversal, son principios no negociables que marcan la diferencia entre construir solo infraestructura o construir un futuro con sentido.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que se producen casi 400 millones de incidentes no fatales al año a nivel mundial. De este total, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) calcula que alrededor de 9 millones ocurren en el continente americano. Esta cifra nos recuerda que la seguridad no puede ser un tema secundario. Las empresas tenemos la responsabilidad de habilitar canales de denuncia seguros y anónimos, evaluar riesgos de manera constante y, sobre todo, cultivar una cultura de prevención que proteja la vida y el bienestar del colaborador en cada jornada laboral. Contar con un Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo (SGSST) sólido deja de ser una obligación para convertirse en un compromiso ético con quienes hacen posible todo lo que construimos.

En Cementos Pacasmayo creemos firmemente que la seguridad se construye en equipo. Por eso, promovemos la creación de comités de Seguridad y Salud tanto en áreas operativas como administrativas. Estos espacios garantizan que cada voz sea escuchada y cada preocupación atendida, porque proteger a las personas —lo más valioso que tenemos— requiere colaboración, empatía y corresponsabilidad. Así, no solo cumplimos la normativa: cultivamos confianza, bienestar y un entorno sostenible que trasciende en el tiempo.

En esa línea, nuestro compromiso se traduce en hechos. Actualmente, nuestro SGSST abarca a 1,966 empleados y 4,723 contratistas. En 2024, acumulamos 12,886 horas de formación y contamos con una plataforma de cursos asincrónicos que permite a cada colaborador capacitarse en el momento que mejor se ajuste a su disponibilidad. 

La seguridad y la salud es un compromiso colectivo que empieza con el cuidado individual y se extiende al cuidado mutuo. Cada decisión y acción debe poner siempre a las personas en el centro, porque el verdadero progreso no se define por la rapidez de un proyecto ni por el volumen de producción. La seguridad y la salud en el trabajo van mucho más allá de los indicadores: son el reflejo de nuestra humanidad compartida. Porque el progreso real se mide en lo esencial: que cada persona regrese a casa, sana y segura, al final de cada día para compartir en familia.