El Ministerio de Economía y Finanzas del Perú ha culminado su primer mes de gestión con resultados significativos que reflejan una política de estabilidad macroeconómica, disciplina fiscal y promoción de la inversión. Bajo el liderazgo de la ministra Denisse Miralles, el Gobierno implementó medidas que buscan fortalecer la confianza de los mercados y garantizar el uso eficiente de los recursos públicos.
Entre las principales acciones, destaca la aprobación del Decreto de Urgencia N.º 008-2025, orientado a promover la austeridad y eficiencia en el gasto público. Esta disposición permitirá generar ahorros estimados en S/ 1200 millones durante el año, asegurando el cumplimiento de la regla fiscal del 2025, que fija un límite del 2,2 % del PBI. Según Miralles, “la estabilidad económica es la base que sostiene la confianza y la inversión. Cada sol público debe traducirse en empleo, servicios y bienestar para las familias peruanas”.
El MEF también destinó S/ 317 millones para obras de prevención ante inundaciones en regiones como Lima, Áncash, La Libertad, Ica y Lambayeque, y S/ 48 millones al Ministerio Público para fortalecer la lucha contra el crimen organizado, reconociendo la seguridad ciudadana como un componente esencial del desarrollo económico.
En materia de inversión pública, el país registró una ejecución de S/ 44 085 millones entre enero y octubre, un aumento del 6 % respecto al año anterior, marcando el nivel más alto en la última década. Este avance fue impulsado por el programa Ejecuta+, que brindó asistencia técnica a más de 900 entidades públicas y facilitó el destrabe de 3000 proyectos a nivel nacional.
El impulso a la inversión privada también fue determinante. La firma de la Adenda del Puerto de Matarani permitirá adelantar US$ 700 millones para su modernización, incrementando en 50 % la capacidad del terminal portuario y dinamizando la economía del sur peruano. Asimismo, el shock nacional de desburocratización, con un avance del 69 %, ha permitido habilitar inversiones por más de US$ 200 millones en sectores estratégicos como minería, energía, transporte y agroindustria.
Los indicadores macroeconómicos confirman la solidez financiera del país: un riesgo país de 124 puntos básicos, inflación controlada en 1,4 %, reservas internacionales de US$ 89 623 millones, deuda pública en 31,8 % del PBI, y una proyección de crecimiento de 3,5 % para 2025. Además, las expectativas empresariales se mantienen 17 meses consecutivos en el tramo optimista, el periodo más prolongado desde 2018.
En cuanto a la coordinación institucional, el MEF fortaleció su enfoque de gestión de puertas abiertas, articulando esfuerzos con gobiernos regionales, gremios empresariales y el Congreso. Asimismo, junto al Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), estableció un grupo de trabajo técnico para reforzar la política fiscal y monetaria, en estricto respeto a la autonomía del ente emisor.
Finalmente, la ministra Denisse Miralles reafirmó el compromiso del sector al señalar: “El Perú está dando señales claras: somos un país estable, predecible y confiable. Seguiremos protegiendo la economía, reforzando la seguridad ciudadana y promoviendo la inversión como motor de oportunidades en todas las regiones”.
