Más de US$500 millones en transacciones de cobre estaban pendientes o se concluyeron en lo que va de este mes, la mayor suma registrada para enero en datos de Bloomberg que se remontan 12 años. Está aumentando el interés en fusiones después que años de subinversión limitaron la capacidad de las mineras para satisfacer la creciente demanda del metal, dijo en entrevista telefónica Stephen Gill, socio gerente de Pala Investments.
“Observamos que las grandes mineras señalan su necesidad de comprar crecimiento”, dijo Gill, cuya empresa de inversión centrada en la minería y los metales es la principal accionista de Nevada Copper Corp. “Debido a años de subinversión, sus carteras de proyectos en preparación ahora están vacías y solo se pueden reabastecer mediante adquisiciones porque hacen falta años para desarrollar, obtener los permisos y construir una nueva mina de cobre”.
El interés en los activos de minería de cobre está creciendo rápidamente después que en 2017 los precios del metal registraron su mayor alza en siete años ante interrupciones que ampliaron el faltante de oferta. Aunque el avance perdió fuerza desde que los precios alcanzaron su valor más alto en tres años a fines de diciembre, analistas de Goldman Sachs Group Inc. dicen que la perspectiva sigue siendo positiva. Además, señales de un crecimiento mundial sincronizado están impulsando las perspectivas de demanda, lo cual subraya la necesidad de activar rápidamente nuevos proyectos de cobre.
ESCASEZ
La producción quedó 175.000 toneladas métricas por debajo del consumo en los primeros 10 meses del año pasado, según el Grupo Internacional de Estudio sobre el Cobre. El déficit superó las 143.000 toneladas del mismo período del año anterior, después que una huelga en Escondida, la mina de BHP Billiton Ltd. en Chile, y una prohibición temporal de exportación de concentrados de Grasberg, de Freeport-McMoRan Inc., redujeron la oferta a comienzos de 2017, afirmó el grupo de estudios.
Podría haber más problemas de oferta. Más del 30% de los contratos de mano de obra se negociarán este año en Chile y Perú, lo cual expone casi un quinto de la oferta global de cobre a una paralización este año, estimaron los analistas de Bloomberg Intelligence Andrew Cosgrove y Eily Ong.
La escasez de inversiones y la dificultad para encontrar proyectos rentables trajeron aparejada una reducción de gastos en adquisiciones el año pasado. El valor de las transacciones pendientes o concluidas se achicó de US$3.030 millones en 2016 a US$1.150 millones en 2017.
Con todo, en términos numéricos, las 51 transacciones por activos de cobre del año pasado fueron el conteo más alto de los datos de Bloomberg en por lo menos 12 años.
“Las valuaciones del cobre se desconectaron del valor al que terminará cotizando el cobre a largo plazo”, dijo Cosgrove en entrevista telefónica. Los activos se están valuando tomando como base precios del cobre inferiores a US$7.000 cuando el costo de activar más capacidad es mucho más alto, dijo.
Fuente: Bloomberg