Burgomaestres de las provincias del Santa y Casma cuestionan al saliente mandatario por la falta de obras en coordinación con los gobiernos locales. La sociedad civil de Chimbote pide que se hagan “nuevas elecciones”.
Durante el año y siete meses en el que Pedro Pablo Kuczynski (PPK) estuvo al frente de la Presidencia del Perú, los alcaldes de la zona costa de Áncash, coincidieron en señalar que no se pudieron ejecutar varios de los proyectos que los gobiernos locales esperaban.
Además de la constante inestabilidad política a la que estuvo sujeta el régimen del PPK, los burgomaestres también hacen mención al retraso en el inicio de las obras que deben ejecutarse en el marco del proceso de reconstrucción con cambios, tras el paso del Fenómeno del Niño Costero.
TOMAN LA PALABRA. En el caso de Chimbote, la alcaldesa provincial Victoria Espinoza García, dijo que la obra de la vía de evitamiento ya es una realidad, así que la salida de PPK no generaría mayores inconvenientes. Aún así, mostró su preocupación por otros proyectos pendientes que fueron compromisos del Ejecutivo y que hasta el momento no han sido asumidos.
“Hay expedientes que tenemos pendientes en el tema de Cambio Puente, para saneamiento y diversos expedientes que se ven retrasados por esta crisis, en lugar de ayudar. Hoy necesitamos la unión de los peruanos, sin corrupción, claro que sí, pero tenemos que superar esta crisis política”, señaló.
“Los gobiernos locales no tenemos ninguna ayuda del Gobierno, hasta hoy, la Municipalidad Provincial del Santa no ha recibido ni un solo real de esta gestión. Estamos trabajando con lo que tenemos y podemos, pero el desarrollo económico está paralizado en cada uno de los pueblos”, agregó luego.
Cuestionó que a un año del Niño Costero, “no se haya hecho absolutamente nada”.
Algunas cuantas horas antes de conocerse de manera oficial la renuncia de Kuczynski, el alcalde de la provincia de Casma Jhosept Pérez Mimbela, se mostró a favor de la salida del aún mandatario, porque consideraba que no tenía “autoridad moral” para seguir al frente del país.
“Esto (la crisis) es un atraso, ya que tenemos una recesión económica bastante grande en nuestro país. Los gobiernos locales hemos sido postergados. En nuestro gobierno regional hemos venido padeciendo esta situación, de tener un gobernador regional preso, un segundo al que le pasó lo mismo, tenemos momentáneamente estabilidad política regional, pero esta situación nos perjudica como gobiernos locales. Hemos tenido que hacer maravillas para conseguir algo de presupuesto ya que el Gobierno Central ha estado paralizado”, enfatizó.
El alcalde del distrito de Nuevo Chimbote, Valentín Fernández Bazán, saludó la renuncia de PPK ante la crisis en el Ejecutivo y pidió un adecuado proceso de transición y reactivación económica para el país.
“Se negociaron cosas que debieron ser descentralizadas, ahora ya sabemos por qué los proyectos de las municipalidades se han visto entrampados, como manejaban el país por eso que cuando pedíamos obras para las ciudades, no había respuestas”, dijo.
En otro momento mostró su preocupación pues el distrito se encuentra a puertas de recibir de manera oficial las compactadores que llegaron del Ministerio del Ambiente, maquinarias que aún no pueden ser usados pues es la ahora renunciante titular de esta cartera, Elsa Galarza Contreras, tenía previsto visitar Nuevo Chimbote el próximo 27 de marzo para firmar el acta de entrega, sin embargo el burgomaestre informó que recibió una llamada del ministerio indicando la postergación sin fecha definida.
DESDE EL CONGRESO. Los parlamentarios, representantes de Áncash, también se pronunciaron tras la renuncia de Kuczynski.
La congresista del Frente Amplio, María Elena Foronda Farro consideró que PPK no tenía la adecuada capacidad moral para continuar gobernando al país, por ello – recordó – su bancada planteó el segundo pedido de vacancia contra él.
Foronda dijo que la postura del Frente Amplio es de que el gobierno de transición convoque a nuevas elecciones, ya que “no se aferran al cargo”.
“Lo que tenemos que hacer ahora es estar muy atentos, para que los procesos que se van a abrir contra los congresistas corruptos, que se investigue no solo a los cinco, sino también al sexto que ha hecho la denuncia”, mencionó.
El congresista Carlos Domínguez Herrera, por su parte, señaló que tras la renuncia del presidente Pedro Pablo Kuczynski es momento de trabajar en una agenda nacional por la gobernabilidad del país donde es necesario que el primer vicepresidente, Martín Vizcarra, aperture el diálogo con todas las fuerzas políticas para evitar que el Perú siga paralizado política y económicamente.
Domínguez señaló que Vizcarra Cornejo deberá priorizar los proyectos contemplados en la Reconstrucción con Cambios que avanzan lentamente sobre todo en Áncash donde a pesar de haber sido una de las regiones más afectadas, la ejecución de obras viene demorando y la Contraloría ha detectado hechos irregulares en algunos proyectos.
El obispo de la Diócesis de Chimbote, monseñor Ángel Francisco Simón Piorno, también se pronunció sobre esta situación y lamentó la crisis en la que ha entrado el país, tras la salida de PPK del gobierno, no obstante consideró que a su criterio no supo manejar desde un principio el despacho presidencial y que su imagen se fue deteriorando debido a las denuncias a las que estuvo expuesto.
Simón dirigió sus críticas hacia el papel que ha desempeñado el Congreso de la República, ya que sostuvo que, para él, realizó un constante “hostigamiento” al presidente PPK.