A medida que América Latina perfecciona su enfoque en energía limpia, los gigantes internacionales de la energía están liderando la carga para abandonar los combustibles contaminantes.
El gigante francés Engie SA anunció que cerrará centrales eléctricas a carbón en Chile al mismo tiempo que la estadounidense AES Corp. y la italiana Enel SpA se han comprometido a dejar de construirlas. Las medidas constituyen el lado menos atractivo de la conversión a energía limpia en la región, donde la inversión creció sobre 25 veces más rápido que la tasa global en el 2017.
“Hay un cambio claro en el mercado en América Latina y se está volviendo más explícito en las estrategias de las compañías”, dijo James Ellis, gerente de Bloomberg New Energy Finance para América Latina. “Se está desarrollando un impulso para las energías renovables en la región y las empresas no quieren quedarse atrás”.
Tome como ejemplo a Engie, para la que América Latina se ha convertido en la clave de su estrategia global de abandonar la producción de electricidad contaminante y aumentar las inversiones en energías renovables y gas natural. La región se dispone a recibir un tercio de las inversiones en dólares de Engie en el 2018, superada solo por su mercado local en Francia.
“Estamos cambiando completamente hacia energías renovables y utilizando lo que tenemos en el gas natural como respaldo para las nuevas tecnologías”, dijo Philip De Cnudde, máximo ejecutivo de Engie para América Latina.
Fuente: Bloomberg